Un anuncio del detergente chino Qiaobi está siendo el centro de la polémica por transmitir un mensaje racista. La razón es que no solo trae la blancura a la ropa, también a las personas. De hecho, su spot muestra cómo un hombre negro se convierte en un joven asiático tras pasar por la lavadora con una dosis del producto.
Las críticas no se han hecho esperar. Acusan a Qiaobi de sobreexplotar el ideal asiático de belleza en el que la “blancura” es la máxima. Pero, según la firma, la escena representa la “hipersensibilidad” que se vive en Occidente cuando se trata de racismo. “No pretendemos nada más que promocionar el producto. Nunca habíamos ni siquiera pensado acerca del asunto del racismo”, ha explicado el portavoz de Leishang Cosmetic Company, marca productora del detergente.
De hecho, según ha añadido, en China se emitió una versión más corta del anuncio donde no aparecía el hombre negro. Además, no tienen “ni idea” de cómo ha llegado el vídeo íntegro a las redes. Sin embargo, el resultado ha afectado seriamente a la marca, especialmente en EEUU donde se ha considerado un claro ejemplo del racismo que hay en China.
