El fenómeno de las compras de segunda mano está cada vez más de moda en España al poder adquirir objetos de calidad a un precio asequible y en buen estado.
Segundamano.es ha realizado un estudio a más de 20.000 usuarios del portal con el objetivo de analizar los hábitos de compraventa en el sector.
Las principales razones por las que los usuarios compran estos productos se basan en el ahorro y la oportunidad de comprar productos asequibles. El 81% de los españoles recurre al mercado de segunda mano para adquirir estos productos. Esta compra supone un ahorro medio de 205 euros.
Existen otras razones menos significativas por las que los usuarios acceden a esta alternativa. Algunas pueden deberse a:
- La compra de productos que se necesitan para practicar una nueva afición (7%)
- La contribución al cuidado del medio ambiente (6%)
- La renovación de aquellos objetos que más se utilizan (4%).
Ante esta situación, no es de extrañar que más del 99% de los usuarios que recurren a esta práctica, recomiende su experiencia a sus conocidos.
El gasto en los productos de segunda mano
El gasto medio en este tipo de productos fue de 164 euros el último año. Concretamente, un 23% se gastó entre 50 y 100 euros mientras que el 21,1% invirtió más de 300 euros en este tipo de compras.
Por otro lado, las comunidades autónomas con mayor gasto fueron País Vasco con una media de 191€ y Castilla y la Mancha con 177€. En el otro lado del ranking encontramos a Aragón y Cantabria que gastaron menos en productos de segunda mano con 138 € y 144€ respectivamente.
Los sectores más favorecidos por el fenómeno de segunda mano se concentran en las áreas de electrónica, hogar, ocio y deporte, moda y niños.
Desde Segundamano.es se explica el auge de esta tendencia: “el contexto económico actual nos hace consumir de una manera mucho más inteligente y responsable, pensando tanto en nuestro bolsillo como con el medio ambiente. En este sentido el mercado de segunda mano permite comprar artículos a buen precio, dar una segunda vida a un producto que otra persona ya no utiliza e incluso adquirir objetos para probar un nuevo hobby como, por ejemplo, practicar un deporte o tocar un instrumento”.