El emblema que preside el capó de los coches Bentley es una letra B con alas. Y en un futuro podría llegar a honrar esos apéndices y volar. Porque la marca automovilística británica, de la mano del ingeniero español José María Ortega Hernández, ha desarrollado una tecnología que podría convertir la figura en un dron funcional y autónomo.
Hace unos meses la empresa registró la patente de esta innovación a través de Organización Mundial de la Propiedad Intelectual. El desarrollo convertiría el icónico "Flying B", como se denomina el emblema, en un dispositivo capaz de ofrecer una experiencia interactiva para los conductores, al combinar automoción, aeronáutica y avances tecnológicos.
El dron tendría diversas aplicaciones, desde la seguridad al entretenimiento
La invención haría que la figura tuviera aplicaciones en diversas áreas, desde el entretenimiento hasta la seguridad. Y es que tal y como se recoge en la patente y explican desde la marca, el dron podría asistir a los conductores en sus desplazamientos y también en casos de emergencia.
Así, podría iluminar el vehículo desde el aire, en caso de accidente nocturno, facilitando la visibilidad para servicios de atención. También podría guiar a los conductores en situaciones de poca visibilidad o entornos desconocidos.
Asimismo, podrá ayudar a identificar espacios de aparcamiento disponibles o buscar rutas alternativas, caminos menos transitados o apoyar en los accesos y la movilidad.
Más allá de aplicaciones funcionales, el dron también ha sido concebido atendiendo al carácter premium y exclusivo de la marca, así como en su voluntad de entretenimiento. En esta línea, el emblema volador también podrá capturar fotografías y grabar vídeos aéreos que den pie a la generación de contenido único.
Tal y como refleja la patente, el dron no pesaría más de 250 gramos y su batería se cargaría mientras queda guardado bajó el capó de los vehículos. El dron contaría con cuatro rotores para elevarse y equilibrarse en el aire, y podría ser controlado a través de los teléfonos inteligentes o directamente desde la pantalla del automóvil.
A lo largo de las últimas semanas el ingeniero José María Ortega Hernández ha compartido más detalles a través de su perfil en LinkedIn. Asegura que el primer boceto del desarrollo se realizó en 2019, y que la patente se registró oficialmente el pasado mes de julio. Apunta que la combinación de tecnologías es un homenaje al fundador de la compañía, W.O Bentley, quien diseñó el primer motor de avión rotativo en Reino Unido.
La compañía no ha confirmado que haya puesto en marcha la producción de estos dispositivos, ni en qué vehículos estaría disponible. Pero el registro de la patente es una muestra de los esfuerzos de la compañía por mantenerse relevante, mejorar la experiencia de la conducción y reforzarse en los terrenos de la exclusividad y la innovación.
