Cada vez el comercio electrónico se está metiendo más en nuestras vidas. Con creatividad, se puede aplicar a muchas más cosas de las que parece a simple vista.
Algo tan sencillo y a la vez utópico como comprar agua desde la propia nevera finalmente con creatividad y tecnología se puede llevar a cabo. Por tanto, una vez más, se demuestra que ni mucho menos está todo inventado, solo hay que pensar más allá...
Si algo no puede faltar en la nevera de un consumidor francés es el agua Evian y para que esto no ocurra la marca ha lanzado un curioso y sencillo sistema. Se trata de un imán, bautizado como SmartDrop, desde el que el usuario puede pedir el agua que necesite.
El consumidor solo ha de introducir el número de botellas que quiere y cuándo las quiere recibir. El imán se conecta al wifi y envía la petición a la web de Evian. La agencia BETC Paris es la responsable de este trabajo
