Colgate podría lanzar el packaging perfecto para la pasta de dientes

Gracias a una joven diseñadora americana podríamos estar hablando del fin de nuestra lucha con la pasta de dientes cuando se resiste a expulsar las últimas gotas del tubo. Un nuevo packaging inspirado en el origami podría ser la solución a nuestros problemas.

Esa pelea entre nosotros y la pasta de dientes. Porque sí, porque sabemos que aún le queda pasta para unos cuantos lavados más aunque sea misión imposible sacar del tubo el producto que todavía queda en su interior. ¿Te sientes identificado con esta situación?

 

Si es así, es posible que su fin esté cerca. La joven diseñadora Nicole Pannuzzo ha ideado un novedoso packaging para los tubos de la pasta de dientes. En concreto, su idea forma parte de un proyecto de rediseño para Colgate

 

"La pasta de dientes es algo que usamos todos los días pero que pasa desapercibido para nosotros. Estoy muy interesada en coger esas pequeñas cosas que nos molestan aunque no seamos muy conscientes de ellas y hacer algo al respecto". - Nicole Pannuzzo

 

Así decidió empezar a trabajar en el rediseño del packaging para Colgate con un tubo que permite aprovechar hasta la última gota de la pasta de dientes. El diseño está inspirado en el origami y es capaz de retorcerse hasta convertirse en un objeto casi plano.

 

El proceso de ideación

Prototipo de funcionamiento

Resultado final

 

Junto con el diseño de este packaging, Pannuzzo ha desarrollado una nueva identidad visual para Colgate ya que considera que el branding de la marca es confuso e ineficiente:

 

"Si vas a la sección de pastas de dientes hay 20 cajas diferentes. Es muy difícil distinguir entre la Colgate Extra White y la Colgate Fresh". - Nicole Pannuzzo



La brillantez de su idea no ha pasado desaprecibida ante los ojos de Colgate cuyo departamento creativo ya se ha puesto en contacto con la diseñadora para discutir sobre su idea. Según Pannuzzo, la compañía le ha dicho que llevaban "muchísimo tiempo pensando en un packaging nuevo" y parece que ya han encontrado la solución. Al menos, ¡eso queremos pensar!