La resaca de los Premios a la Eficacia en Comunicación Comercial ha dejado conclusiones y valoraciones no sólo respecto a los premiados en la gala. Y es que el escenario se convirtió en sí mismo en protagonista.
El enclave elegido fue el Teatro Real, una construcción emblemática de Madrid situada junto a la Plaza de Oriente, frente al Palacio Real.
Una ubicación tan peculiar forma parte ya de la conversación de los asistentes, que en conjunto se han llevado una buena impresión tras realizar balance de aspectos positivos y negativos de esta localización.
Puntos valorados por los asistentes
El aspecto mejor valorado por los asistentes a los Premios Eficacia 2015, además del contenido, ha sido el diseño del espacio, que otorgaba una imagen de exclusividad y reputación al evento estrella de la AEA (Asociación Española de Anunciantes), unas vistas agradecidas por los profesionales que salían de sus despachos para disfrutar de lo mejor en Estrategias de Comunicación.
Este teatro, construido en 1850, transportó a los profesionales del Marketing y la Comunicación a un escenario bien distinto al rutinario, con su estilo ecléctico y neoclásico. El viaje se producía al ambiente de la ópera del siglo XIX y se magnificaba con la actuación de la mezzosoprano Nancy Fabiola Herrera. Aún con ello, la contemporaneidad no se perdía al conjugar esta fórmula con otras actuaciones de grupos actuales
El espacio se distribuía en ocho zonas: tres rotondas (los espacios más recogidos) y cinco salas; el Salón Goya, el Salón Carlos III (destacaba por el color azul frente al tradicional rojo, los espejos y las lámparas de araña), el Salón Vergara, el Salón Arrieta (destacaba por ser verde y estar iluminado en esta ocasión a modo pub) y el Salón Felipe V.
El aforo en esta ocasión de Premios Eficacia 2015 en términos de butacas se mantiene muy similar al de pasadas ediciones, con 1.746 localizaciones del Palacio Real frente a los 1.812 asientos del Palacio Municipal de Congresos de Madrid.
Además del estilo arquitectónico, un aspecto positivo del nuevo emplazamiento ha sido el encontrarse en el centro de la ciudad, frente a la localización de la edición de 2014.
Siempre se puede mejorar
No cabía duda de que el espacio elegido era estéticamente adecuado. Sin embargo, los asistentes han mencionado elementos de mejora para próximas ediciones. Todo con el tono de una crítica cosntructiva, claro.
En primer lugar, uno de los aspectos mencionados es sobre la falta de señalética: la gente no sabía cuántas salas había disponibles para networking ni cómo podían pasar de un área a otra, detalle que quizá fuera el responsable de la aglomeración de gente en ciertos salones.
Uno de los profesionales que así lo expresó fue Helena Grau, directora de servicios al cliente de SCPF, que apunta a la señalética como “algo mejorable” del lugar. Pese a ello, el lugar le ha parecido “una ubicación excelente” al tratarse de un “espacio emblemático”.
La distribución de las áreas destinadas al cóctel también sería uno de los puntos a mejorar. Al no tratarse de un espacio diáfano resultaba complicado que los profesionales se encontrasen entre sí y cambiar de unas salas a otras en ocasiones era difícil.
“Es mucho mejor tener estas vistas que las de Ifema”
Profesionales como Fernando Lázaro, socio fundador de BTOB, hubiesen preferido más espacio para el momento del cóctel. Sin embargo, este publicista ha afirmado preferir la nueva localización porque “es mucho mejor tener estas vistas que las de Ifema”. Quizá una buena solución hubiera sido abrir más plantas o distribuir el coctel de forma uniforme.
Partidario de la misma idea ha sido Eduardo Lozano, Director creativo de TBWA, que ha señalado: “No se puede decir nada malo del Teatro Real. La fachada y el interior son impresionantes. Pero ahora estamos como recluidos, para el cóctel era mejor el Palacio Municipal de Congresos”, comentó entre risas.
Como detalle vital, desde Reason Why pedimos a la AEA que tenga en cuenta que hay dos máximas fundamentales para que salgamos de ahí con una sonrisa de oreja a oreja.
En primer lugar, un evento sin jamón no es evento (para ser justos, había muchísimo jamón y muy sabroso, por cierto) y en segundo lugar, un evento sin WIFI es una reunión de amigos. Y es que en los Premios Eficacia 2015 no había WIFI y dependiendo de la zona y la compañía telefónica tampoco teníamos cobertura ;-)