Coldplay ha ofrecido cuatro noches -de ensueño a juzgar por la crítica especializada y los comentarios de los aficionados- de música en Barcelona. Cuatro conciertos, celebrados los días 24, 25 27 y 28 de mayo en los que las canciones de la banda británica han compartido protagonismo con el compromiso medioambiental del grupo por hacer de la gira “Music of the Spheres” la más sostenible hasta el momento.
“Nos comprometemos a hacer que nuestro Tour “Music of the Spheres” sea lo más sostenible y bajo en carbono posible”, aseguran desde Coldplay en la página web específica para el tour. Aseguran, para ello, estar guiados por tres principios clave: por un lado, reciclar extensivamente y reducir tanto su consumo como sus emisiones de CO2 en un 50%; por otro, reinventar apoyando nuevas tecnologías ecológicas y desarrollando nuevos métodos de turismo sostenibles y bajos en carbono; y por último, restaurar, tratando que su recorrido sea lo más beneficioso posible para el medio ambiente mediante la financiación de proyectos basados en la naturaleza y la tecnología y mediante la extracción de una cantidad significativamente mayor de CO2 que el que produce la gira.
Viajar en vuelos comerciales, confeti reciclable o suelo cinético son algunas de las medidas sostenibles de Coldplay
Con el objetivo de cumplir estos propósitos, Coldplay ha puesto en marcha una serie de medidas e iniciativas. Entre ellas, la asociación con DHL en busca de servicios logísticos sostenibles; prescindir de combustibles fósiles siempre que sea posible, viajar en vuelos comerciales, en lugar de privados; el uso de confeti biodegradable o pirotecnia con menor carga explosiva; iluminación LED, o la instalación de suelos cinéticos o bicicletas generadoras de electricidad para que los fans suministren energía al espectáculo.
Entre estas soluciones se encuentra la colaboración con BMW, que ha proporcionado la potencia necesaria para la iluminación, el audio, el vídeo, los efectos especiales y el soporte técnico a las actuaciones del grupo en España y Portugal a través de sistema modular de almacenamiento energético. Tal y como explican desde la firma automovilística, los conciertos han estado equipados con 40 baterías recicladas de BMW i3 -adecuadas segundos usos sin procesamiento adicional- con capacidad de 1.600 kWh, que se cargan mediante energía renovable como el viento, paneles solares fotovoltaicos o generadores que funcionan con biodiésel.
Esto, apuntan desde BMW, contribuye a que los espectáculos sean más sostenibles y que la gira sea una de las más ecológicas de la historia. “La conciencia compartida de la sostenibilidad ha llevado a un proceso de creación conjunta intenso y creativo entre BMW y Coldplay a lo largo de los últimos años"; ha señalado Jens Thiemer, Vicepresidente Senior de Clientes y Marcas de BMW, en un comunicado. "Desde BMW, se lleva el concepto de sostenibilidad a otro nivel con el uso de las baterías BMW i3 para conciertos en directo de cara a contribuir a una mayor sostenibilidad y reducir la huella de carbono”.
“Estamos orgullosos de asociarnos con BMW para crear el primer concierto en directo con baterías recargables y portátiles. Esta innovación nos permitirá alimentar nuestros conciertos con energía limpia y renovable”, han señalado desde Coldplay, según recoge el comunicado de la automovilística. La asociación entre BMW y Coldplay se remonta a 2021 a la campaña de lanzamiento de los modelos iX e i4, totalmente eléctricos.
Con todo, no han sido pocos quienes han cuestionado el acercamiento de Coldplay a la sostenibilidad, poniendo en tela de juicio qué es lo que realmente contamina e impacta más al medioambiente: si que la banda opte por concentrar sus conciertos en una única ciudad y así evitar sus desplazamientos, o que sus seguidores, miles de personas, se trasladen desde otros puntos del territorio para verles.
Efectos de luces y mochilas vibratorias
Más allá del lucimiento del repertorio musical y la propuesta sostenible, la gira de Coldplay busca también marcar un nuevo estándar en lo que se refiere a inclusividad, accesibildiad y participación. Y para ello, ha recurrido también a la tecnología.
Muestra de ello son las pulseras luminosas conocidas como “xylobands”, que la brand británica acostumbra a usar en sus conciertos y que, en este sentido, han formado parte de los cuatro espectáculos ofrecidos en Barcelona. Se trata de unos brazaletes con luces LED que pueden ser activadas por radio y que contribuyen a generar los efectos especiales y luminosos en cada actuación.
Pese a que muchos de los asistentes a los conciertos de Coldpay optan por conservar las pulseras a modo de recuerdo, el grupo invita a devolverlas al final de cada espectáculo para que puedan ser reutilizadas en la siguiente actuación. Para ello, comparte información durante los conciertos del porcentaje de ellas que han sido recicladas en cada ciudad por la que pasan.
Por otro lado, los conciertos ofrecidos por Coldplay en Barcelona han contado también con interpretes en lengua de signos, en línea con el compromiso de la banda con la accesibilidad a la música. Gracias al trabajo de los intérpretes de la Asociación En-canta-dos los asistentes con discapacidad auditiva han podido disfrutar de una experiencia más completa. La lengua de signos, además, se habría visto complementada con unas mochilas vibratorias que ayudan a transmitir el ritmo de las canciones a los asistentes con dificultades auditivas.
