Calvin Klein ha vuelto a generar polémica con su nueva campaña en la que utiliza el sexting para llegar al público joven.
Las imágenes se centran en parejas y grupos de jóvenes que intercambian mensajes subidos de tono entre ellos.
El fotógrafo Mario Sorrenti ha sido el escogido para llevar este trabajo cargado de sensualidad y erotismo.
El target que ha escogido la marca es, claramente, el del público joven. Principalmente, el de los millenials, la generación que se comunica e incluso encuentra pareja o relaciones casuales a través de su smartphone.
En el vídeo se puede apreciar aún más el camino que ha elegido la marca, dado que muestra a jóvenes relacionándose a través de sus teléfonos.
El tema de la sensualidad es uno de los más recurrentes de la marca, como ya pudimos ver en su anterior campaña.