Hasta hace no mucho el GIF se miraba con cierto desprecio por ser el máximo exponente del atraso digital en una página web (“Todavía usa GIFs animados, ¡jajaja!”). Sin embargo ahora el formato se ha puesto de moda como una forma divertida y ligera de mostrar fragmentos de un vídeo.
Con este resurgimiento del GIF nace OTTO, una cámara de apariencia analógica creada para grabar GIFs digitales.
Con un diseño muy retro que parece más bien un homenaje a los años 90, OTTO funciona con conexión al smartphone a través de una aplicación.
Además el objetivo de sus creadores es que OTTO pueda ser hackeada por cualquier persona que quiera agregar nuevas funciones como, por ejemplo, conectar un flash a la cámara.