Desde su lanzamiento en 1995 bajo el nombre de Cadabra, Amazon ha escalado posiciones hasta convertirse en el portal de e-commerce de referencia.
Con más de 2.000 millones de proveedores y 132.000 empleados distribuidos por todo el mundo, Amazon ha conseguido quintuplicar sus beneficios anuales desde 2006. El año pasado, el gigante del comercio electrónico obtuvo unos beneficios de 274 millones de euros.
La abultada cuenta de resultados que acumula la compañía no la convierte, sin embargo, en una de las empresas “mejor pagadas”. De hecho su CEO, Jeff Bezos, gana al año 81.840 dólares (unos 63.000 euros), frente a los más de 2.000 millones de dólares que se embolsó en 2012 el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg.
La política de empresa también es firme con la atención al cliente. Todos los trabajadores de cualquier división trabajan dos días cada dos años en este departamento. De esta manera, comprenden cómo funciona y qué es lo que preocupa a sus clientes.
Esa rotación interna favorece la satisfacción de los empleados y también de sus clientes. Según TechieSense el 62% de los consumidores reconoce que realiza alguna compra en Amazon.com al menos una vez al mes. Pueden encontrar de todo.
Su cartera de productos es tan amplia que ha pasado de vender únicamente libros a contar con 17 categorías y 143 subcategorías diferentes, entre las que se encuentran artículos de electrónica, cuidado personal, deporte y textil.
Su punto débil, no obstante, es la alimentación. El 37% de sus clientes confiesa que nunca compraría alimentos frescos en su web, a pesar de los 500.000 productos diferentes que ofrece de este tipo. Le siguen los artículos de lujo y los bienes de consumo envasados.
En contrapartida, Amazon ha sabido conectar con sus clientes a través de las redes sociales. En mayo de 2014 suscribió un acuerdo con Twitter por el que permitía añadir al carrito todos los artículos que apareciesen en la red social bajo el hashtag #AmazonCart.
En 2013 fue la empresa que más invirtió en Google Ads, con 158 millones de euros destinados a esta partida. Y han demostrado ser rentables. Tras un apagón informático de apenas una hora, la firma dejó de ingresar más de 4 millones de euros en ventas.
Dos décadas después, Bezos ha visto cumplido su deseo de crear un portal de ventas online que superase las limitaciones de un negocio físico.