La moda independiente se une para reclamar un modelo productivo más sostenible y rentable

  • Reorganizar el calendario, reducir los viajes o reimaginar los desfiles son algunas de las propuestas
  • Gabriella Hearst, Oscar de la Renta o Donna Karan ya se han unido a la iniciativa
moda independiente transformación industria

La pandemia del coronavirus ha dejado las colecciones de primavera/verano en un almacén y ha puesto en jaque la rentabilidad de la industria de la moda. En el mejor de los casos, algunas compañías acaban de reanudar la producción para el otoño mientras se reabre el debate sobre el modelo productivo del sector.

El diseñador Dries van Noten ha impulsado la iniciativa

Un grupo independiente de agentes del sector, que engloba desde CEOs hasta directores creativos y compradores, se han unido para reclamar una transformación en el mundo de la moda. El diseñador Dries van Noten, cuya firma pertenece al grupo catalán Puig desde hace dos años, ha sido el impulsor de la iniciativa que, como se explica en esta carta abierta a los actores de la industria, reclama procesos más sostenibles:

Acordamos que el entorno actual, aunque desafiante, presenta una oportunidad para un cambio fundamental y bienvenido que simplificará nuestros negocios, haciéndolos más sostenibles ambiental y socialmente y, en última instancia, alineándolos más estrechamente con las necesidades de los clientes”, explican en el comunicado.

Para lograr este objetivo, proponen reajustar la estacionalidad y el flujo, tanto de ropa de mujer, como de hombre, comenzando con la temporada Otoño/Invierno 2020:

  • Volver a poner la temporada de otoño/invierno en invierno (agosto/enero) y la temporada de primavera/verano en verano (febrero/julio)
  • Crear un flujo de entregas más equilibrado a lo largo de la temporada para proporcionar novedades pero también tiempo para que los productos generen deseo
  • Establecer periodos de descuentos al final de la temporada para permitir más ventas a precio completo: enero para otoño/invierno y julio para primavera/verano

Asimismo, este colectivo busca mejorar la sostenibilidad en toda la cadena de suministro y el calendario de ventas mediante la reducción del producto innecesario:

  • Menos desperdicio en telas e inventario
  • Menos viajes. Utilizar salas de exposición digitales que complementen las interacciones personales
  • Revisar y adaptar los desfiles de moda

Con estas propuestas, el sector de la moda espera conseguir que la industria sea más responsable respecto a su impacto en los clientes, en el planeta y en el propio sector. Además, tal y como indican en la carta abierta, pretenden “traer de vuelta la magia y la creatividad que ha hecho de la moda una parte tan importante de nuestro mundo”.

Objetivo: reestructurar la moda

Gabriella Hearst, Rodarte, Proenza Schouler, Oscar de la Renta, Linda Fargo, Erdem o Donna Karan son algunas de las marcas que ya se han unido a la iniciativa. Pero el movimiento ha continuado creciendo y sumando adeptos. Tal es el caso del editor de moda Tim Blanks, que desde su medio, Business of Fashion, ha lanzado #RewiringFashion (reestructurando la moda), desde la que pide medidas y soluciones más radicales.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Una publicación compartida de @rewiringfashion el

Nos encontramos ante a un sistema de moda que es cada vez menos propicio para la creatividad genuina y, en última instancia, no sirve a los intereses de nadie: ni diseñadores, ni minoristas, ni clientes, ni siquiera a nuestro planeta. Es hora de reducir la velocidad y redescubrir la narración y la magia de la moda”, explica el comunicado publicado en la página web.

Estas son las medidas que proponen para intentar solucionar algunas de las problemáticas más acuciantes de la industria:

  • Reorganizar el calendario de la moda, pues no está sincronizado con el cliente final, es insostenible para los profesionales de la industria y perjudicial para las ventas. Para ello, solicitan:
  1. Combinar las semanas de la moda masculina y femenina en enero/febrero y junio para dar lugar a periodos más largos de venta total y minimizar los viajes
  2. Alinear los desfiles, las entregas de colecciones y las temporadas reales para que los desfiles tengan lugar justo antes de que las colecciones, acorde a cada estación, lleguen a las tiendas
  3. Reducir los viajes mediante la sincronización de los períodos de compra de la próxima temporada con presentaciones de la temporada actual
  • Reimaginar los desfiles de moda, ya que los consideran desfasados. En esta línea proponen:
  1. Reposicionar los desfiles como eventos diseñados para atraer clientes y generar deseo por las colecciones justo antes de que lleguen a las tiendas
  2. Evitar las reglas impuestas por la convención o los consejos de moda, con respecto al formato de los espectáculos
  3. Dotar de mayor libertad a los diseñadores para crear sus presentaciones
  • Romper con la adicción del sector a los descuentos, ya que capacita a los compradores a esperar reducciones permanentes, erosionando la rentabilidad y el valor de la marca para todos a lo largo de la cadena de valor. Para lograrlo, prentenden:
  1. Evitar descuentos extremos para la temporada primavera/verano 2020, dando prioridad al valor de la marca y a la rentabilidad a largo plazo
  2. Emplazar las rebajas a enero y julio de cada año, comenzando con la temporada otoño/invierno 2020
  3. Detener los descuentos durante la temporada, como el

    Black Friday

    , el Cyber Monday y el Singles Day

El compromiso sostenible de Condé Nast

Desde Condé Nast también son partidarios de transformar la industria, por lo que se han sumado a este movimiento renovador con el lanzamiento del Glosario de la moda sostenible, un recurso que busca ser referencia sobre el papel del sector en la emergencia climática y la sostenibilidad. El documento parte del compromiso de la compañía por convertirse en la voz del cambio y aumentar los conocimientos de la industria para lograr un modelo productivo más sostenible.

Condé Nast se propone compensar su huella de carbono para el año 2030

El Glosario es fruto de la alianza con el Centro para la Moda Sostenible (CSF) de la London College of Fashion (Universidad de las Artes de Londres) e incluye aportaciones de los directores de Vogue. Además, está respaldado por una red de académicos e investigadores en materia de sostenibilidad a nivel mundial.

Para enriquecer el debate de crear moda más sostenible, nuestra industria necesita un lenguaje compartido y un conjunto de definiciones científicamente correctas a las que todos podamos referirnos. Seguiremos actualizando el Glosario con la ayuda de nuestros socios académicos", ha explicado Wolfgang Blau, Global Chief Operating Officer de Condé Nast y Presidente de Condé Nast International.

Asimismo, el grupo editorial ha dado a conocer sus compromisos de sostenibilidad con una estrategia a cinco años que busca mitigar su impacto ambiental global mediante la reducción de las emisiones y la compensación de la huella de carbono. El plan trazado por Condé Nast para alcanzar estos objetivos incluye medidas en cuatro áreas fundamentales:

  • Reducir las emisiones: la compañía se propone compensar su huella de carbono para el año 2030, comenzando con una reducción del 20% de las emisiones corporativas y del 10% en la cadena de suministro para finales de 2021
  • Involucrar a los proveedores: se promoverá un sector editorial más sostenible, así como la revisión de protocolos en materia de adquisiciones y el fomento de iniciativas promovidas por la industria
  • Uso de materiales más sostenibles: Condé Nast trabajará en la transición hacia el uso de un papel 100% certificado internacionalmente para finales de 2021 y eliminará todos los envases de plástico de base fósil y no reciclables de sus publicaciones para 2025
  • Ser voz del cambio: el grupo aspira a que sus marcas sean reconocidas como líderes en la defensa de la sostenibilidad y fijará estándares para informar sobre temas de cambio climático y moda responsable. El citado Glosario de la moda sostenible se engloba dentro de este apartado

La compañía asegura que la salud de las personas, de los negocios y del planeta está interconectada. “La credibilidad de nuestro periodismo en materia de medio ambiente depende de nuestra voluntad a la hora de mejorar nuestras propias operaciones y cadenas de suministro, de manera que se reduzca drásticamente nuestra huella de carbono y el nivel de residuos”, sostiene Wolfgang Blau.

Gucci también rompe con la estacionalidad de las colecciones

Gucci ha anunciado que se une a las reivindicaciones de la industria. Alessandro Michele, Director Creativo de la compañía, asegura que la marca italiana no tendrá temporada y pretende romper así con la larga tradición del sector de cinco desfiles anuales y, en cambio, quedarse con solo dos al año.

La industria de la moda hace frente a una importante recesión económica a causa de la pandemia del coronavirus que, además, ha reabierto el debate y las preocupaciones sobre la sostenibilidad y el cambio climático.

"Nos reuniremos solo dos veces al año, para compartir los capítulos de una historia nueva. Capítulos irregulares, alegres y totalmente libres, que se escribirán mezclando reglas y géneros, alimentándose de nuevos espacios, códigos lingüísticos y plataformas de comunicación", ha dado a conocer Michele en su cuenta de Instagram.

Un mercado dominado por grandes grupos

Sin embargo, llevar a cabo todos estos cambios no será una tarea sencilla. Muchos calendarios y procesos de la industria están regulados por organismos gubernamentales, como la Chambre Sindycale de la Mode en Francia o el Brotosh Fashion Council; y la mayor parte del sector se encuentra bajo el dominio de dos grandes conglomerados: LVMH y Kering.

En este sentido, muchas firmas se han visto obligadas a sobrevivir ajustándose a las reglas trazadas; esto es, realizar mínimo cuatro colecciones al año, acelerar la rotación de producto para hacer frente al low cost o poner en marcha desfiles grandilocuentes para captar la atención de sus seguidores en redes y de sus clientes potenciales.

El sector apuesta por los formatos digitales para realizar los desfiles

A pesar de todo, el contexto generado por el coronavirus está haciendo que todo esto se tambalee. Una muestra de ello es la apuesta por los formatos digitales que ha hecho el British Fashion Council para su semana de la moda. Por su parte, directores creativos de algunas marcas, como Valentino o Saint Laurent se han pronunciado en contra de los calendarios y desfiles obsoletos.

Aunque la crisis sanitaria ha puesto a la industria frente a pérdidas de millones de euros, también ha generado un movimiento de solidaridad y unidad entre las marcas independientes del sector para poner fin a las estructuras impuestas por los grandes grupos. Y esto puede suponer el comienzo de un cambio que lleva décadas reclamándose.

Más info.: Rewiringfashion.org