Apple ha sido condenada a pagar 318 millones de euros al fisco italiano por evasión de capitales, una medida con la que habría logrado ventajas fiscales como un menor tributo a la hacienda pública italiana.
Según ha determinado la justicia del país transalpino, la compañía habría transferido 880 millones de euros de beneficios a su filial en Irlanda para lograr una tasa impositiva más baja.
Así lo ha recogido el períodico italiano La Repubblica, que explica que la cantidad con la que ha sido multada la empresa de Cupertino asciende a 318 millones después de que la compañía alcanzara un acuerdo con el fisco italiano.
Un peligroso precedente para Apple
Esta multa puede suponer un punto y aparte en la ingeniería fiscal que llevan a cabo en Apple, dado que la empresa utiliza métodos similares en todo el mundo para beneficiarse de exenciones de impuestos.
Según publica el medio italiano, los jueces encargados del caso habrían logrado determinar que la evasión de impuestos de Apple ocurrió entre 2008 y 2013. Desde Apple, sin embargo "uno de los mayores contribuyentes en el mundo y que pagan cada euro de impuestos que adeudan dondequiera que hacen negocios".