Una vez más, en cuanto a negocios se refiere, dos grandes compañías apuestan por la teoría de que la unión hace la fuerza. Fiat Chrysler y PSA Peugeot han confirmado que se fusionan con la intención de ahorrar costes y crear el cuarto mayor fabricante de coches del mundo. Su volumen de mercado estaría valorado en más de 3.700 millones de euros, según fuentes cercanas.
Una fusión al 50-50
La nueva compañía tendrá sede en Holanda y las acciones estarían repartidas al 50-50 entre la marca italo-estadounidense y la francesa. Lo mismo ocurrirá con la dirección: John Elkann (actual presidente de FCA) será el Presidente y Carlos Tavares (actual presidente de PSA), CEO. La idea es que la compañía matriz tenga “representación equilibrada y mayoría de consejeros independientes”.
Además, en un comunicado conjunto aseguran que la operación se haría oficial sin cerrar fábricas. Se espera que las juntas directivas de ambos grupos lleguen a un memorando de entendimiento vinculante en las próximas semanas. Detrás de la fusión también estarían las intenciones de ambas marcas para avanzar en la movilidad sostenible, el desarrollo de la conducción autónoma y la conectividad digital.
La fusión, añaden, “crearía el cuarto fabricante de coches del mundo por ventas anuales con un total de 8,7 millones de vehículos” e ingresos combinados de casi 170.000 millones de euros y un resultado operativo de más de 11.000 millones de euros.
Además se “combinaría la fuerza de las marcas de los dos grupos en los segmentos de lujo, premium, vehículos de pasajeros convencionales, suv, camiones y vehículos comerciales ligeros, haciéndolos aún más fuertes”.
El ministro francés de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, ya ha dado su visto bueno al proyecto de fusión que, a su juicio, responde a las necesidades del sector. "Esta operación responde a la necesidad del sector automovilístico de consolidarse para afrontar los desafíos de la movilidad del futuro", afirma en un comunicado.