Greenpeace sepulta a Boris Johnson en plásticos para denunciar la gestión de residuos de Reino Unido

  • “Wasteminster: A Downing Street Disaster” critica las palabras vacías del Ejecutivo británico ante el cambio climático
  • Según la organización, Reino Unido es el segundo mayor productor de residuos plásticos por persona en el mundo

De Westminster a Wasteminster. Ese es el apodo que Greenpeace Reino Unido ha otorgado al número 10 de Downing Street para poner en evidencia la hipocresía de la que la organización medioambiental acusa al Gobierno británico en relación a la política de reciclaje y tratamiento de residuos. Lo hace, además, con una impactante creatividad que ha logrado hacerse viral en cuestión de horas a través de las redes sociales.

La pieza ha sido desarrollada en colaboración con Park Village y Studio Birthplace

De la mano de la agencia multidisciplinar Park Village y Studio Birthplace, Greenpeace ha puesto en marcha la campaña “Wasteminster: A Downing Street Disaster” con la que critica las palabras vacías de las autoridades del país respecto a su huella ambiental. La dramática creatividad -creada a partir de animación, efectos especiales y figuras en miniatura que representan a Boris Johnson y Michael Gove-, inunda la calle en la que se reúnen habitualmente los ministros con miles de envases de plástico y sepulta al presidente en residuos, mientras este pronuncia un discurso -imitado por actores profesionales, pero con palabras extraídas de alegatos reales- sobre el posicionamiento de Reino Unido contra el cambio climático.

Con esta contraposición, la organización denuncia las malas prácticas del ejecutivo en lo que respecta a la política de desechos plásticos. Según apunta una investigación de Greenpeace, Turquía recibe más de un tercio (38%) de todas las exportaciones de residuos plásticos del Reino Unido. “El gobierno debe quiere ser visto como un líder en la lucha contra la contaminación plástica. Y aunque han anunciado pasos positivos, pero muy pequeños para reducir la producción de plástico del Reino Unido, deben tomar las medidas adecuadas para reducir nuestra contaminación plástica y dejar de arrojar nuestros desechos plásticos en otros países. El gobierno debe asumir la responsabilidad”, comentan desde la organización.

Y es que, según Greenpeace, el Reino Unido es el segundo mayor productor de residuos plásticos por persona en el mundo, detrás de EE. UU. Por eso, en la pieza aparecen una cantidad que plásticos que refleja el promedio de 1,8 millones de kilogramos por día, o 688,000 toneladas al año de desechos plásticos británicos que están alimentando emergencias climáticas en todo el mundo. En consecuencia, la organización apunta a que estas actuaciones no solo están dañando los ecosistemas naturales a nivel internacional, sino que están generando problemas de salud en comunidades locales de países como Turquía o Malasia, que han reportado problemas respiratorios, hemorragias nasales o dolores de cabeza entre sus ciudadanos vinculados a la quema de desperdicios.

El lanzamiento de la campaña coincide, según recoge The Drum, con una encuesta realizada por YouGov que apunta a que el 86% de los ciudadanos británicos están preocupados por el volumen de desechos plásticos generados por su país. La investigación también indica que el 81% desean que el gobierno haga más para abordar el problema, incluido el 62% que apoya una prohibición de la exportación de residuos plásticos.