Patrocinio de plástico y montones de residuos, vías para la concienciación sostenible en Black Friday

  • La empresa australiana Zero Co propone la esponsorización de botellas de plástico para eliminar residuos
  • Greenpeace ha protestado contra el impacto del Black Friday con cuatro grandes montones de basura
Patrocinio de plástico y montones de residuos, vías para la concienciación sostenible en Black Friday

La preocupación por el impacto de la actividad comercial en el medio ambiente es un debate que desde hace años copa, junto a los descuentos y promociones, la comunicación y acciones vinculadas a Black Friday. El objetivo de muchas marcas en estas fechas es poner en valor su compromiso sostenible, a la par que impulsan sus resultados de negocio. 

El plan “100YR CleanUp” pretende eliminar 15.000.000 botellas de plástico del planeta cada año

En este marco, la empresa australiana Zero Co, especializada en la creación de envases a partir de plásticos retirados del entorno natural, ha puesto en marcha una promoción muy particular. En lugar de promocionar sus propios productos, están animando a la esponsorización de montones de basura recogida de ecosistemas naturales, en el marco de su inicitava “100YR CleanUp”, que busca eliminar 15.000.000 botellas de plástico del planeta cada año durante los próximo 100 años. 

Este Black Friday, los australianos gastarán más de 6.000 millones de dólares en cosas que no necesitan, y el 80% terminarán en un vertedero. En un momento en que el ecosistema del planeta está al borde de la ruptura, creemos que el mundo necesita menos cosas, no más”, comentan desde la compañía. “Así que este Black Friday no hay ventas llamativas ni descuentos únicos en Zero Co. Hoy, el único producto que estamos promocionando es un humilde montón de basura, que puedes patrocinar por solo 20 dólares”.

Así, los usuarios están invitados a colaborar con el proyecto patrocinando la recogida de 300 botellas por 20 dólares; de 750 botellas por 50 dólares o de 1.500 botellas por 100 dólares. 

La medida de no ofrecer descuentos en sus productos, sino animar a los consumidores a esponsorizar basura, se produce unas semanas después de la construcción en Egipto de una enorme estructura piramidal utilizando un millón de botellas de agua de basura recolectada del río Nilo. El objetivo fue atraer la atención del mundo antes de la cumbre climática mundial COP27, que tuvo lugar en el país africano. 

La iniciativa se llevó a cabo en asociación con VeryNile, organización que limpia las orillas del Nilo y entrelaza el impacto social y ambiental para eliminar los desechos inorgánicos del río; y junto al artista egipcio Bahia Shehab. La estructura alcanzó los 10 metros de alto, 12 metros de ancho, y estaba compuesta por de 18.000 kilogramos de basura. Mike Smith, Fundador de Zero Co, acampó en la parte superior de la pirámide durante tres días para subrayar el mensaje de concienciación de la campaña.

Las montañas de residuos de Greenpeace

Siguiendo una línea similar, la organización Greenpeace ha querido poner de manifiesto el impacto medioambiental del consumo y eventos comerciales como el Black Friday colocando cuatro grandes montañas de residuos en el centro de Madrid. La protesta se ha materializado en cuatro pilas de ropa, tecnología, plásticos y cartones de envíos, acompañados de los lemas “Hecho para tirar”, “Sus beneficios, tus desperdicios”, “Las marcas nos están consumiendo” y “Black Friday destruye el planeta”. 

El Black Friday no va de quien necesita comprarse una lavadora porque no llega a fin de mes. El Black Friday es el ejemplo pernicioso de cómo las marcas nos incitan y obligan a comprar un pantalón más, cuando ya tenemos seis iguales en el armario. Es un día de excusa que han creado las marcas para deshacerse de su elevada producción”, ha declarado Celia Ojeda, responsable de Biodiversidad de Greenpeace, en un comunicado. “Esta sobreproducción de existencias que las marcas no son capaces de vender en el Black Friday o en otro momento consumista acaba en vertederos, incineradoras o exportada a otros países”.

Con esta acción, la organización activista solicita que el Ministerio de Transición Ecológica aplique estrictamente el artículo 18 de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular. En él se señala lo siguiente: “Queda prohibida la destrucción o su eliminación mediante depósito en vertedero de excedentes no vendidos de productos no perecederos tales como textiles, juguetes o aparatos eléctricos, entre otros, salvo que dichos productos deban destruirse conforme a otra normativa o por protección del consumidor y seguridad. Dichos excedentes se destinarán en primer lugar a canales de reutilización, incluyendo su donación, y cuando esto no sea posible, a la preparación para la reutilización o a las siguientes opciones de la jerarquía de residuos, respetando el orden establecido en el artículo 8”.