Cuando no es una cosa es otra, el caso es que el logotipo de Madrid para la candidatura de los Juegos Olímpicos del 2020 no deja de estar en el ojo de la polémica.
Esta vez ha sido la tipografía. Como sabréis, y si no ya os lo cuento yo, muchas tipografías las crean los diseñadores para potenciar su imagen de marca y su reputación. La mayoría son de libre acceso... es decir, se pueden usar sin problema; pero si hay fines comerciales y alguien va a ganar dinero, tendremos que repartir una parte del pastel. Es justo ¿no? Algo que a Madrid y a Tapsa se les pasó por alto hasta que las redes sociales (cómo no!?) se lo recordaron...
Se trata de un "malentendido" que no ha supuesto nada en cuanto al castigo económico, pero que una vez más abre una puerta al debate..
La candidatura olímpica de Madrid 2020 se vio obligada ayer a hacer un desembolso inesperado después de que las redes sociales destaparan una nueva polémica sobre su logo.
Candidatura olímpica de Madrid 2020
Un "malentendido" que le costará 1.500 euros. Tapsa, la agencia que ultimó el logo ganador creado por el estudiante Luis Peiret , usó para escribir "Madrid" una tipografía sin tener el permiso o la licencia necesarias.
El tipo de letra de autor usada –Baar Shopia– fue diseñada por el artista sueco Lutz Baar. A priori, según se especifica en su web, la tipografía sólo podía ser tratada para fines privados o culturales, no para fines comerciales, como era en este caso. Es más, el artista pedía a los que la usaran que dieran de forma simbólica diez dólares a una asociación benéfica.
