¡El pop-up funciona! … si está bien hecho

Hemos escuchado una y otra vez que la publicidad disruptiva es algo del pasado. Pero Raúl Abad, de AdSalsa, defiende que el anuncio pop-up es una de las mejores fórmulas para captación de clientes… ¡si lo sabemos hacer bien!

Pop-ups sí, pero bien hechos. Raúl Abad, Online Marketing Startegist de AdSalsa, ha defendido en su ponencia en OMExpo la validez de este formato publicitario. Eso sí, hay que saber hacerlo bien.

 

Cuando el objetivo es conseguir el email de un cliente, hay muchas fórmulas válidas, explicaba Abad. Lo primordial es no agobiar al potencial cliente con un formulario largo. Pedidle el nombre y el email. Ya llegará el momento de contactar con él y conocerle mejor.

 

Una vez está clara esta premisa, las formas de contactar con él son muchas. En el header, en el footer, en la barra lateral, al final de un post en un blog… y, por qué no, en un pop-up. Este formato publicitario es uno de los más llamativos, pero también tiene mala reputación.

 

 

El pop-up es molesto, aparece de la nada con una oferta que quizá no nos interesa, muchas veces interrumpe y, lo peor de todo, puede que no sepamos ni cómo cerrarlo. Lo más lógico es que, cuando consigamos deshacernos de él, ya estemos empezando a "mirar mal" a la marca.

 

Abad defiende que no tiene por qué ser así. Un pop-up de calidad puede ser tan efectivo (o incluso más) que las técnicas menos agresivas de publicidad.

 

Dejar que se cierre

Si el cliente quiere cerrar el pop-up, lo cerrará. Y ponérselo difícil no le hará cambiar de opinión. Hay que poner un botón de cierre del pop-up accesible y bien visible. Así, si el potencial cliente decide no interactuar con el anuncio, le habremos interrumpido un poco menos.

 

 

Diseño compatible con la web

Estamos hablando de captar suscriptores para una web, así que el pop-up que les mostramos debería ir de acuerdo con el diseño de la página. Eso lo hace un poco menos disruptivo y evita que parezca un anuncio de otra marca.

 

 

Dar tiempo

El cliente ha venido a ver la web y si se encuentra un pop-up antes de que carguen los contenidos, no le prestará un minuto de atención. Cerrará el anuncio inmediatamente para ver lo que quería: la página. En cambio, si le damos 10 segundos de retraso al pop-up, el usuario habrá tenido tiempo de echar un vistazo a la página y no estará tan ansioso por cerrarlo.

 

Conoce a tu audiencia

El pop-up no se escapa de la moda de la personalización. Ya que Internet permite segmentar la audiencia, podemos aprovechar esa información para mandar ofertas más personalizadas según el tipo de usuario. También es importante no bombardear. Las herramientas de segmentación permiten, por ejemplo, mostrar el pop-up sólo a las nuevas visitas, para no cansar al público habitual.

 

El “smart pop-up”

Ya hay empresas que ofrecen estudiar el comportamiento del consumidor para lanzar un pop-up más efectivo. Es el caso de Bounce Exchange, después de analizar por qué productos se ha interesado el usuario. Tomamos nota: