El Gobierno cubano estudia la "reinserción de anuncios comerciales" en los medios audiovisuales como "herramienta de marketing" para dinamizar y financiar la televisión en la isla, según ha asegurado la consultora The Havana Consulting Group.
"Medio siglo después de ser abolida la publicidad en los medios de comunicación, esta herramienta podría regresar a los medios audiovisuales en la isla", apunta esta organización con sede en Estados Unidos.
El paso dado por el ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera con la creación de un "proyecto de televisión por cable pagada" podría convertirse en el "trampolín" para la inclusión de anuncios en la televisión cubana.
En opinión del grupo de estudio, la televisión cubana necesita de "financiación para resurgir" y "crear programas nuevos que impacten en la audiencia y compitan con el informal, novedoso y popular 'paquete', que pasa por las manos de millones de cubanos".
Este proceso se puede entender como un intento de mejorar los rígidos canales de la isla, renovar su tecnología y las condiciones laborales e "insertar el país en los mercados internacionales", así como afrontar los "retos" que plantea el proceso de transformación de la economía cubana, añade la consultora.
Así, la inversión de capital extranjero, el desarrollo del turismo y de la industria nacional y de marcas propias "requieren de la publicidad para su desarrollo".
De llevarse a la práctica, la medida "ayudaría mucho al sector privado y a las empresas estatales" para la promoción de sus productos y servicios en una "fuerte competencia con las marcas extranjeras" que hoy se comercializan en la Isla.
Pese a que el proyecto no menciona el término publicidad, "es obvio que una inversión en un servicio de televisión por cable pagada" tiene uno de su principales soportes en los anuncios comerciales, considera The Havana Consulting Group.
Marcas cubanas pertenecientes a empresas del Gobierno como Havana Club, Cohiba, Ciego Montero, Partagás, Montecristo, Cristal o Bucanero, entre otras, "podrían llegar a los ojos y oídos de una avalancha de turistas que se espera lleguen a la Isla en los próximos años".
Las ganancias podrían ser multimillonarias en un "mercado seco en publicidad por más de medio siglo".