¿Estamos abusando de los hashtags?

El hashtag podría morir de éxito. Millones de hashtags circulan cada día por Twitter, Instagram, Tumblr y Vine. Cada vez es más difícil encontrar resultados relevantes. ¿Podría ser una herramienta en decadencia?

Millones de hashtags circulan cada día por Twitter, Instagram, Tumblr y Vine. Facebook se está planteando incorporarlos. Han ganado tal popularidad que algunos ya comentan que están perdiendo el sentido.

 

Noticas, eventos deportivos, programas de televisión... el hashtag se está volviendo omnipresente. Y precisamente podría morir de éxito.

 

En un sondeo que ha hecho la revista BuzzFeed a periodistas digitales, han aparecido muchas opiniones contrarias al hashtag...


 

 

Mala visibilidad

 

En un evento importante el número de tuits con hashtag es tan inmenso que es prácticamente imposible encontrar un tuit relevante en medio de la avalancha. La visibilidad que supuestamente nos da utilizar estas etiquetas está en tela de juicio.

 

La avalancha se produce porque los hashtags son demasiado genéricos. En el sondeo de la revista BuzzFeed la mayoría de los periodistas digitales ha comentado que los hashatgs son inútiles para obtener información. 

 

Por ejemplo, si hubiese un tiroteo en el Empire State Building, buscar por #EmpireStateBuilding nos dejaría miles de tuits de la noticia en medios de comunicación, retuiteadas y compartidas millones de veces por los usuarios. Los pocos tuits de los testigos de la noticia quedan perdidos en la multitud, aunque son los más relevantes.

 

Los periodistas comentan que es más útil buscar por geolocalización y encontrar tuits que digan “estoy bien”, “yo he estado allí” o frases similares.

 

 

Los hashtags sólo dan visibilidad a pequeña escala, en eventos reducidos, conferencias que aceptan preguntas vía tuit... A gran escala hay demasiadas personas usando el hashtag y demasiado pocas buscándolo.

 

 

En publicidad

Los hashtags promocionados fueron la primera forma de publicidad de Twitter. Pero con el tiempo algunos también dudan de su efectividad. Es imposible para las marcas controlar la conversación con un hashtag. En algunos casos, los hashatgs patrocinados se han vuelto en contra del creador.

 

Le pasó a McDonald’s con su #McDStories, que quería reunir anécdotas felices ocurridas en un McDonald’s... y acabó siendo una galería de horrores de las malas experiencias de algunos clientes.

 

 

 

El origen del hashtag

Al contrario de lo que muchos creen, el hashtag no lo inventó Twitter. Su creador fue Chris Messina, un programador defensor del software libre. Fue él quien pensó que añadiendo un # al inicio de las palabras clave de un tuit sería más fácil hacer búsquedas y encontrar resultados relevantes. 

Lo que no preveía era una adopción tan masiva de la idea.

 

 

Twitter no lo inventó, no le pertenece y ahora no sabe cómo controlarlo.