Sólo una tercera parte de los incrementos de precio planeados para algunos productos se hace efectiva en el mercado. Se trata de una caída considerable en comparación con el 50% que si se hacía efectivo en 2012, según un estudio global realizado por Simon-Kucher & Partners y la Professional Pricing Society.
Para combatir los problemas de precio, la innovación de producto es una de las mejores soluciones, según revela este estudio. Sin embargo, un 72% de los productos nuevos falla a la hora de llegar a un target rentable, algo que el estudio considera como “fracaso”. Una cuarta parte de los encuestados aseguró que ninguno de sus productos nuevos tuvo éxito a la hora de satisfacer al target considerado como más rentable.
Para este estudio se encuestó a más de 1.600 profesionales de todo el mundo. Un 80% dijo estar sufriendo una fuerte presión en los precios y el 58% aseguró estar envuelto en una guerra de precios en su sector. Y es que el estudio revela que de las empresas que desean subir el precio en un 5%, sólo un 1,3% lo acaba realizando. Lo que esto significa es que el 39% de las empresas es incapaz de mejorar sus márgenes de beneficios.
Todo lo anterior se traduce en una reducción de los beneficios necesarios para financiar la innovación. Una innovación que es la que puede permitir a una empresa competir en el mercado y hacer frente a esas guerras de precios.
Sin embargo, no todo son malas noticias. Centrándose en las empresas más exitosas del mundo, el estudio pone de manifiesto que la gestión de la innovación, del valor y del precio son objetivos de nivel 'C' para este tipo de compañías. Aquellas que consiguen llegar al target rentable a través del precio consiguen unas ganancias un 25% superiores a las del resto.
La clave está en saber integrar el marketing y las estrategias de pricing en los procesos de innovación, desde la conceptualización del producto hasta su lanzamiento. Además, es necesario comprender el verdadero valor del producto en el mercado para definir targets de manera adecuada.