Los consumidores españoles han vivido el mes de octubre con cierto pesimismo. El Indicador de Confianza de los Consumidores (ICC) de este mes demuestra que la percepción de la economía española, la economía familiar y el empleo han caído ligeramente.
Estos datos sugieren también una ligera caída del consumo. En objetivo final del Indicador de Confianza de los Consumidores es predecir la evolución del consumo en España.
Pesimismo en el mes a mes
El ICC está compuesto de dos indicadores: el Índice de Valoración de la Situación Actual y el Índice de Expectativas. Los dos han caído durante el mes de octubre.
Los españoles valoran la situación actual en 51 puntos, sobre una escala de 200. Son casi 3 puntos menos que en septiembre. En cuanto al futuro, los consumidores han valorado sus expectativas para los próximos 6 meses en casi 80 puntos. Este valor ha empeorado 6 puntos desde el mes pasado.
Aún así, las perspectivas de futuro están mejor valoradas que la situación actual, lo que denota un cierto optimismo.
Además, hay que tener en cuenta que octubre es un mes en el que el ICC suele ir a la baja. Los meses de septiembre y octubre suelen ser duros para los consumidores, que sufren la 'resaca' de las vacaciones.
Lo mismo ocurre con el paro. La Encuesta de Población Activa, que hemos conocido hoy, muestra que el paro ha subido este mes en casi 90.000 personas. El dato queda matizado porque el paro sube todos los meses de octubre desde 1996. Además, este octubre se ha producido la primera mejora del paro interanual desde que empezó la crisis.
Optimismo respecto a 2012
La confianza de los consumidores ha caído ligeramente de septiembre a octubre, pero ha mejorado radicalmente si la comparamos con el mes de octubre del año anterior.
En 2012 los consumidores valoraban la situación actual en 30 puntos. Los 51 puntos de este mes representan una mejora del 70%.
Las expectativas de futuro han mejorado en un 50%, de los 50 puntos de 2012 a los 80 puntos actuales.
La clave: el empleo
La percepción de la situación actual y de las expectativas depende de muchos factores, pero el ICC ha demostrado que el principal es el empleo.
La percepción sobre el empleo se mueve casi de forma paralela con la percepción general de la situación de España.
Además, la mayoría de personas que son optimistas respecto al futuro lo son porque prevén incorporarse al mercado laboral. Y entre los que son pesimistas sobre el futuro, el factor principal es la pérdida del empleo.
