Barbie ha dejado de ser lo que era.
La famosa muñeca de Mattel está dispuesta a romper barreras, ya sean sociales o psicológicas. Y es que ahora dejará bien claro que con una talla 40 también se puede estar a la moda.
Siguiendo esta premisa, Barbie dice adiós a la cintura minúscula y a su esbelta figura para lucir caderas y muslos voluptuosos en tres nuevos modelos de muñecas que reflejarán una “visión más amplia de la belleza”.
Cinco décadas siendo acusada de promover un arquetipo físico poco saludable parece que han sido suficientes. Mattel apuesta ahora por promover unos hábitos de vida saludables y un cuerpo realista que represente la diversidad que viven las dueñas de las muñecas. De hecho, los nuevos modelos también incluirán diferentes tonos de piel.
“Estamos emocionados ante este cambio de imagen, literalmente, de la marca. Estas nuevas muñecas representan unas medidas más representativas del mundo que las chicas ven a su alrededor. La variedad de tipos de cuerpo, tonos de piel y estilos permiten que las niñas se sientan más identificadas. Creemos que tenemos la responsabilidad con ellas y con sus padres de reflejar una visión más amplia de la belleza”, ha explicado Evelyn Mazzocco, Vicepresidenta y Directora General de Barbie a escala global.
De la casa de Ken a la portada de Time
La noticia fue presentada en la portada de la revista Time con la esperanza de que este lanzamiento impulsara las ventas de la muñeca, que habían sufrido una caída del 14% en todo el mundo, según informó la compañía el pasado octubre. Y con ese ya van ocho trimestres consecutivos de pérdidas...
Hasta la presentación, poco se sabía de la estrategia más conocida como “Proyecto Amanecer”. Después, llegaron los detalles: 24 peinados diferentes, incluyendo un afro, un pelirrojo rizado y un pelo liso y azul. Detalles que se alejaban de la tradicional concepción rubio platino de Barbie.
En palabras de Richard Dickinson, Presidente y Jefe de Operaciones de Mattel, “desde hace 55 años, Barbie ha sido un icono global, cultural y una fuente de inspiración e imaginación para millones de niñas de todo el mundo. Su habilidad de saber crecer y evolucionar en el tiempo, mientras se mantiene fiel a su espíritu, es la razón de que Barbie sea la muñeca de moda”.
Pero la brillante melena no es lo único que ha dejado atrás. También abandona un estereotipo. O al menos, pretende hacerlo. Ya no quiere ser relacionada con su antigua imagen de “muñeca superficial”. Acusaciones que se ganó hace años no solo con su apariencia, sus 90 cm de pecho y 45 de cintura, medidas con las que le faltaría un 17% de masa corporal para la menstruación. Sino también con movimientos como el de 1963, año en el que Barbie llevaba un libro que hablaba de cómo perder peso.
Un acogida con los brazos abiertos
El cambio de imagen ha sido muy bien acogido. Especialmente por aquellos que clamaban por un diseño más realista para la muñeca. “Si queremos que una generación crezca con una buena autoestima, tenemos que acabar con esto. Es una iniciativa bienvenida para reflejar de un modo más real la diversidad de formas, tamaños y culturas de la humanidad. Especialmente en una gama con la que varias generaciones de niñas se han identificado desde el comienzo”, ha sentenciado Andrew Radford, Ejecutivo de Beat, organización que trabaja con los trastornos alimenticios.
Una postura que apoya también Liamp Peston, Portavoz de la campaña Sé Real de la organización YMCA. “Sabemos que los niños desde muy pronto están influenciados por las imágenes que ven a su alrededor. Tenemos investigaciones que dicen que las niñas de tan solo cinco años están preocupadas por su aspecto y su talla. Es muy importante que los jóvenes acojan la diversidad y se sientan felices con quienes son. Las muñecas que Mattel pretende fabricar podrían ayudar mucho a eso. Espero que este sea el primer paso para un cambio en el mercado infantil general”.
Porque con una talla 40 también se puede ser feliz, ¿verdad, Barbie?