El característico packaging de Budweiser podría perjudicar la imagen de marca de la empresa.
Así lo demuestra un estudio llevado a cabo por Affinova a través de una encuesta realizada a 450 clientes este año.
La gente va con la mentalidad de comprar Budweiser al súpermercado. Pero al llegar al pasillo de las cervezas y encontrarse con la competencia, duda. ¿Por qué?
“Los clientes tienen una impresión positiva de la marca gracias a los anuncios en TV y otras estrategias de marketing. Pero cuando ven el producto en el mercado, aparte de las emociones que despierte por ser un producto cool o el patrocinador de algún evento, el packaging no expresa lo mismo. Las marcas que están a su alrededor en el lineal lo hacen mucho mejor” dice Blake Howard, vicepresidente senior de Affinova.
Nueve marcas de cerveza han formado parte del estudio. Budweiser se situó como la mejor posicionada en cuanto a marca divertida, energética, amigable y genuina. Al menos antes de entrar a la tienda.
Pero una vez colocada en el lineal, pasa a ocupar puestos más bajos en dichas características. Sólo el ser genuina la hace mantenerse.
“En el contexto de la tienda es donde la marca tiene que hacer el trabajo más duro. Es donde tiene que ganar” dice Howard.
Heineken es el rival más fuerte de Budweiser en cuanto a packaging.
Pese a todo, la marca de cerveza estadounidense se mantiene firme en su diseño.
“Con las innovaciones en el packaging mantenemos a los clientes más jóvenes. Pero al mismo tiempo somos capaces de potenciar nuestra tradición, historia y herencia” señala Howard.
Según Rick Wise, CEO de Lippincott, “los consumidores americanos se sienten atraídos por las marcas que tienen historias reales. Que son transparentes y a la vez innovadoras”. Budweiser está intentado cumplir estos requisitos.
En 2011 mejoraron su diseño dándole una apariencia más moderna, pensando en el futuro pero sin abandonar la lealtad de sus clientes.
Pero las cifras de ventas dicen otra cosa. Sólo en EEUU cayeron un 4,1% el primer trimestre de este año. Y Nielsen ha señalado que las ventas de Budweiser hasta abril cayeron un 7,7%.