El revuelo comenzó este lunes cuando la web de Wal-Mart, el gigante minorista, incluía la categoría “disfraces para gordas” (fat girl costumes) entre sus productos de Halloween.
Se trata de una colección de disfraces para mujeres de talla grande con los que Wal-Mart hirió la sensibilidad de las clientas que buscaban atuendo para la noche de las brujas.
De hecho, la discusión saltó enseguida a las redes sociales. Sus usuarios criticaron duramente en Twitter la propuesta de la cadena de supermercados.
La empresa ya ha pedido disculpas. Su portavoz, Ravi Jariwala, ha tildado la iniciativa de “inaceptable” y recalca que “ya se están tomando medidas para que esto no vuelva a ocurrir”