La adquisición de Twitter por parte de Elon Musk ha situado la atención del ecosistema empresarial global sobra la red de microblogging, especialmente en lo que respecta a la incertidumbre que todavía rodea al futuro de la plataforma. Aunque algunos detalles sobre las ideas y planes del empresario para impulsar el negocio de la compañía ya han comenzado a ver la luz, todavía quedan muchos aspectos por concretar.
Uno de ellos es quién asumirá las riendas de Twitter una vez se complete la operación. Según informa CNBC, se espera que sea el propio Elon Musk el que asuma el cargo de CEO de la plataforma de manera temporal una vez se cierre la compra a finales del ejercicio en curso, tal y como el actual CEO de Tesla habría presentado ante posibles inversores. Qué sucederá con la alta dirección de la compañía una vez se complete el acuerdo es una de las cuestiones sobre las que Musk no se ha expresado públicamente, a pesar de que sí ha compartido sus intenciones en otros aspectos.
Parag Agrawal asumió el cargo de CEO a finales del pasado noviembre, tras la dimisión de Jack Dorsey
En este sentido, la incertidumbre se cierne sobre Parag Agrawal, sobre cuyo futuro se ha especulado en las últimas semanas. Agrawal asumió el cargo de CEO a finales del pasado noviembre, cuando Jack Dorsey, al frente de Twitter hasta aquel momento, presentó su dimisión. Con una trayectoria profesional desarrollada en grandes empresas tecnológicas como Microsoft, Yahoo y AT&T y en labores relacionadas con la investigación tecnológica, fichó por Twitter en el año 2011 como ingeniero de software y fue nombrado CTO de la compañía en octubre de 2017, cargo que ocupó hasta hace apenas cinco meses.
No obstante, Reuters informaba a principios de esta misma semana que Elon Musk podría haber encontrado un nuevo CEO para Twitter, ya que compaginar el liderazgo de la compañía con el de Tesla y Space X podría resultarle complejo y tendría que ceder las funciones a otro profesional. Pero al haber atraído las inversiones de empresarios y entidades amigas, Musk estaría danto más confianza a los inversionistas si se quedase al mando para dirigir la compañía.
7.140 millones de dólares adicionales procedentes de 19 inversores
A este respecto, según unos documentos publicados por la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), Musk ha obtenido 7.140 millones de dólares adicionales procedentes de 19 inversores para respaldar su oferta para comprar Twitter. Se trata de una lista de inversores que ayudarían al empresario a reducir su riesgo personal en la operación, a la que ha aportado 21.000 millones de dólares de su propio capital.
Entre este grupo de inversores se encuentran Lawrence J. Ellison, Co-Fundador de Oracle, que habría aportado 1.000 millones; la empresa especializa en criptomonedas Binance, con 500 millones; la compañía de inversión Honeycomb Asset Management, la firma de capital riesgo Andreessen Horowitz (a16z) o el Príncipe Alwaleed bin Talal, de Arabia Saudí. Este, que inicialmente se habría opuesto a la oferta de Elon Musk, ha afirmado en las últimas horas que el empresario será “un excelente líder para impulsar Twiter y maximizar su gran potencial”.
No obstante, expertos del sector señalan que las inversiones, algunas de ellas pequeñas para el importe de la operación, son un reflejo más de las relaciones personales de Musk y la confianza que en el depositan, que una muestra del optimismo ante las perspectivas de Twitter. Además, apuntan a que la involucración en la plataforma conlleva cierto riesgo político, un factor que podría haber afectado a los fondos proporcionados.
Con todo, el devenir de los próximos meses sigue siendo incierto para la red de microblogging, cuyas acciones en Bolsa no se resienten. El principal reto de Musk al volante será rentabilizar el rendimiento de la compañía, para lo que habría propuesto, entre otras cosas, recortes de puestos de trabajo, aplicar un pequeño coste a las cuentas comerciales y gubernamentales por su actividad en la plataforma, o cobrar a terceros por la inserción de tuits de cuentas verificadas.