La publicidad exterior es efectiva, si bien, la cada vez mayor cantidad de impactos publicitarios hace que en muchas ocasiones pase desapercibida. Y por eso, como tantos otros muchos sectores, también se están aprovechando de los avances tecnológicos para conseguir mejores resultados.
Por eso, esta nueva tendencia de añadir elementos digitales e interactivos a la publicidad exterior, aumenta su efectividad puesto que la experiencia del usuario con la misma es mucho más satisfactoria, lo que fomenta el recuerdo y crea lazos con la marca. ¿Nos encontramos ante un nuevo concepto publicitario?
Al introducirnos en el mundo de la vía pública, dijimos que una de sus desventajas es la saturación publicitaria, provocada por la gran cantidad de piezas que pueblan la ciudad, lo cual degenera en contaminación visual; y que es por esto que las piezas de vía pública deben extremar los recursos que generan impacto para mejorar el tiempo de atención.
Uno de estos recursos es la utilización de digital signage ya que se trata de un medio eficaz para comunicar en distintos entornos.
El término digital signage es el que se emplea de forma generalizada para hablar de los proyectos que utilizan pantallas y/u otros sistemas digitales en el punto de venta y lugares públicos. La gestión y actualización de contenidos se realiza de forma remota (a través de Internet) y permite segmentar la información que enviamos en cada lugar o establecimiento.
Esta tecnología substituye cada vez más los carteles tradicionales para mejorar la presentación y promoción de ventas de productos, para visualizar información o incluso para facilitar la interacción con los contenidos.
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Esta tecnología permite una planificación exacta y más eficaz de campañas publicitarias, ya que el contenido puede ser adaptado al grupo objetivo. Además, la combinación de contenidos interesantes garantiza una alta atención y aceptación por parte de los consumidores.
Sin embargo, debemos advertir que el digital signage no consiste sólo en instalar pantallas, sino que al utilizarlo, se debe tener en cuenta la integración de los dispositivos digitales, es decir, que formen parte de una estrategia y que comuniquen.
