*Fe de erratas: En la primera versión de esta noticia figuraba que César Alierta fue alcalde de Zaragoza. El texto ha sido corregido ya que quien ostentó dicho cargo fue su padre, Cesáreo Alierta.
César Alierta, quien fuera Presidente de Telefónica entre los años 2000 y 2016, ha fallecido a los 78 años en Zaragoza tras pasar varios días en uno de los hospitales del grupo Quirón en la capital aragonesa por un agravamiento de las complicaciones cardiacas que venía arrastrando desde 2019, según hemos podido confirmar desde Reason.Why.
El empresario también fue Presidente de la empresa pública Tabacalera entre los años 1991 y 1996, cuando se culminó el proceso de fusión con el grupo Altadis. En la actualidad, era uno de los principales accionistas del Real Zaragoza junto a la familia De Yarza, propietaria del grupo de comunicación Heraldo de Aragón.
Desde Telefónica han emitido un comunicado señalando que se trata de un día triste para la familia que es la empresa
Desde Telefónica han emitido un comunicado señalando que se trata de un día triste para la familia que es la empresa. La compañía afirma que “la historia de Telefónica no podría entenderse sin su ejemplo, su legado personal y profesional, su visión estratégica y su incansable vocación de hacer de Telefónica el lugar en el que fuera posible hacer un mundo más humano, conectando la vida de las personas”.
También ha señalado que Alierta “ha dejado una huella imborrable”. Además de su trayectoria profesional, desde la compañía aseguran que “siempre será recordado como un trabajador incansable, gran estratega, amigo de sus amigos, enamorado de su Zaragoza natal, fiel y cercano, comprometido y generoso”.
Ha detallado que los trabajadores están convocados mañana a mediodía en las distintas sedes de todo el mundo para guardar un minuto de silencio en memoria de Alierta.
"Todos somos depositarios del inmenso legado que nos deja César Alierta, un corazón abierto de par en par, apasionado, inteligente y valiente. Su visión de futuro y su intuición le llevaron siempre a intentar cambiar el mundo a mejor. El profundo amor por su Zaragoza natal le permitió pasear su tierra por todos los rincones del mundo. Muchas gracias, querido amigo”, ha comentado José María Álvarez-Pallete, Presidente de Telefónica.
Bajo la presidencia de Alierta Telefónica pasó de ser un operador destacado en España y Latinoamérica a convertirse en líder en mercados estratégicos como Brasil, Alemania, España e Hispanoamérica. En su llegada al cargo Telefónica atravesaba dificultades para encontrar un espacio en el nuevo ecosistema digital, pero logró llevar la empresa a la primera división mundial. La compañía llegó a ser incluso la tercera operadora de telecomunicaciones del mundo por capitalización.
Entre otras cosas, impulsó la creación de Movistar Fusión, para por primera vez unir en una única tarifa servicios fijos y móviles; y contribuyó a sentar las bases de la apuesta de la compañía por los contenidos, que comenzó con la creación de Imagenio (luego Movistar+) y que culminó con la compra en 2015 de DTS, la antigua Canal+.
De analista financiero a presidente
Nació en mayo de 1945, hijo de Cesáreo Alierta, quien fue alcalde de Zaragoza de 1966 a 1970 y presidente del Real Zaragoza de 1952 a 1958. Su hermano, Mariano Alierta, fue senador del Partido Popular y diputado del congreso por la UCD. César Alierta era Licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y Máster en Administración de Empresas por la Universidad de Columbia (Nueva York).
Comenzó su andadura profesional en el Banco Urquijo como analista financiero y en 1980 accedió al cargo de director de la división del área de mercado de capitales de este banco. Cinco años más tarde fundó Beta Capital, de la que también fue Presidente y que compatibilizó con la presidencia del Instituto Español de Analistas Financieros y su participación del Consejo de Administración y de la Comisión Permanente de la Bolsa de Madrid.
En 1996 fue nombrado por el Gobierno de José María Aznar presidente de la entonces empresa pública Tabacalera. Alierta procedió a privatizar la entidad y la fusionó con la empresa competidora francesa Seita para formar Altadis.
Ya en el año 2000, también a iniciativa del Gobierno, fue nombrado Presidente de Telefónica, sustituyendo a Juan Villalonga. Pese a no contar con experiencia en el negocio de las telecomunicaciones, impulsó la presencia de la compañía a nivel internacional aprovechando la consolidación de la telefonía móvil.
Su dimisión en marzo de 2016 dio el relevo a José María Álvarez-Pallete
De su paso por la compañía, cabe destacar que César Alierta lideró una de las mayores alianzas estratégicas en el mundo de las comunicaciones con la operadora asiática China Unicom. Según el acuerdo, ambas compañías se comprometían a invertir cada una el equivalente a 1.000 millones de dólares en compra de acciones de la otra. La parte más importante de la operación incluyó la investigación, desarrollo y la práctica común en la gestión de conocimiento y nuevas tecnologías. Esta permitió a Telefónica reforzar su liderazgo y contar, conjuntamente con su homóloga china, con unos 550 millones de clientes en todo el mundo. Alierta fue miembro del Consejo de Administración de China Unicom.
En 2016 César Alierta anunció su dimisión mediante un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), y nombró como su sucesor a José María Álvarez-Pallete, hasta entonces consejero delegado. Tras su renuncia, Alierta pasó a ser el presidente de la Fundación Telefónica y Fundación ProFuturo.
Durante su etapa como primer ejecutivo del grupo de telecomunicaciones presidió también el Consejo Empresarial para la Competitividad, desaparecido ya y cuya misión era defender la imagen de la economía y las empresas españolas en el exterior.
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En mayo de 2017, Alierta abandonó el consejo de administración de la operadora en el que había permanecido desde 1997 y en el que conservaba un puesto tras abandonar la presidencia del grupo un año antes.
Éxitos y reconocimientos
Como Presidente de Telefónica, César Alierta llegó a ser el tercer directivo mejor pagado de la Bolsa española en el año 2011 con una remuneración total de 10,27 millones de euros.
En septiembre del año 2005 recibió en Nueva York el premio “Empresario Español Global”, otorgado por la Cámara de Comercio de España-Estados Unidos en reconocimiento a la gestión desarrollada en la compañía, que permitió la entrada del Grupo Telefónica en el índice bursátil Dow Jones Global Titans 50 de Nueva York. Cinco años más tarde fue reconocido por su contribución al crecimiento y desarrollo de Latinoamérica con la medalla de oro de la "Americas Society" en Nueva York.
En noviembre de 2013 ingresó como académico de número en la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras y en 2018 fue nombrado Doctor Honoris Causa por la facultad de informática de la Universidad Pontificia de Salamanca.
