Una mirada hambrienta y despistada que se desvía a las patatas fritas que come una amiga. Un regazo convertido en mesa en un trayecto en tren. O un habitual traspaso de ese ingrediente que no gusta. Son situaciones que McDonald's Reino Unido dice que sólo se dan en relación a sus productos y que ha recogido en una nueva plataforma de comunicación.
“Only at McDonald's”, ideada por la agencia creativa Leo Burnet Reino Unido, celebra los rituales y hábitos peculiares de los consumidores, la forma diferencial en la que los usuarios disfrutan de la marca. La campaña, que consta de tres anuncios diferentes, identifica verdades universales de la relación de los consumidores con McDonald's.
Apostando por un estilo simple, las creatividades ensalzan tanto el producto como el comportamiento de los usuarios en torno a él.
Con “Fried eyes”, McDonald's refleja lo fácil que es distraerse con las patatas fritas de de un amigo y cómo éstas son capaces de despertar el apetito.
En "The Makeshift Table" la cadena de hamburgueserías retrata cómo acompaña a muchos usuarios en el ajetreo de su día a día y cómo sus productos pueden comerse en cualquier lugar.
Por último, “The gherkin transfer” muestra el reconocible intercambio de pepinillos, un ingredientes que no gusta a todo el mundo, entre una pareja.
“Lo que hace que la deliciosa comida de McDonald's sea verdaderamente icónica son todos los pequeños rituales que la acompañan, ya sea comer queso derretido directamente del envoltorio o transferir pepinillos a un amigo”, apuntan Andrew Long y James Millers, Directores Creativos Ejecutivos de Leo Burnett Reino Unido, según recoge Creative Salon. "Esta última campaña resalta esos pequeños momentos de magia que solo ocurren en McDonald's, de una manera que todos pueden identificarse con ellos”.
“'Only at McDonald's' destaca la relación especial y única que tenemos con nuestros fans y las muchas formas en que disfrutan nuestra comida", comenta Matthew Reischauer, Director de Marketing de McDonald's en Reino Unido e Irlanda. "Todos en todo el país deberían sentirse incluidos y poder ver una parte de sí mismos en esta campaña, en nuestra celebración de esos pequeños momentos cotidianos que hacen de McDonald's una parte especial de la vida de las personas”.
La campaña también incluye activaciones de publicidad exterior que, también apostando por un estilo minimalista, muestran los productos de McDonald’s y evocan algunos de los comportamientos generalizados de los consumidores, como mojar patatas fritas en helado o rebañar un poco de queso derretido del envoltorio de la hamburguesa.
Siguiendo una planificación de medios desarrollada por OMD Reino Unido, la campaña también contará con activaciones en radio, medios digitales y redes sociales. En radio las cuñas juegan con la búsqueda de términos específicos para algunos de los rituales destacados en la campaña, mientras que en redes la marca invita a los usuarios a compartir sus rituales personales relacionados con los productos de McDonald's.