La conducción autónoma se ha convertido en uno de los principales terrenos tecnológicos a explorar por las compañías en los últimos años. No solo en lo que respecta al transporte de pasajeros, sino también de mercancías. Decenas de empresas han experimentado y realizado pruebas pilotos el área del reparto a domicilio con robots autónomos, pero ha sido la start-up Nuro la que ha recibido el primer permiso comercial para llevar a cabo entregas sin conductor en California.
A partir de 2021, los vecinos del estado de California podrán recibir sus alimentos, pedidos de comida o medicamentos a domicilio gracias a vehículos robotizados. Nuro, fundada por dos ex ingenieros de Google y financiada por la firma japonesa Softbank, ha recibido el sello oficial de aprobación del Departamento de Vehículos Motorizados de California para iniciar su servicio pago y operar comercialmente en las carreteras de dos condados cerca de la sede corporativa en Bay Area. La actividad comenzará con la flota de vehículos Prius en modo totalmente autónomo, seguido de los vehículos R2 eléctricos diseñados a medida solo para mercancías.
No obstante, los vehículos de la empresa estarán limitados a 56 km / h (35 mph) y estarán restringidos a operar en condiciones de "buen tiempo”. El R2 usa radar, imágenes térmicas, cámaras de 360 grados para dirigir su movimiento, y carece de volante, pedales o retrovisores laterales. Cuenta con dos compartimentos con temperatura controlada para entregas y las puertas se levantan para garantizar acceso a los artículos una vez que el destinatario ha introducido un código. Durante una prueba en febrero en la ciudad de Houston, el robot entregó una pizza de Domino's Pizza, comestibles de la cadena de supermercados Kroger y productos de Walmart.
El futuro de la entrega sin conductor
En 2017, la compañía obtuvo el permiso para probar sus vehículos con conductores de seguridad adentro y en abril de este año comenzó a realizar pruebas sin controladores. En este sentido, los robots de la compañía han atravesado con éxito las tres etapas de pruebas establecidas en el marco regulatorio de vehículos autónomos de California. A lo largo de cada fase, el Departamento de Vehículos Motorizados ha revisado el registro sustancial de datos e información proporcionada por las distintas empresas de vehículos autónomos, y ha recopilado información de las fuerzas del orden, las comunidades locales y las partes interesadas.
Según ha explicado David Estrada, Chief Legal & Policy Officer de Nuro en un comunicado, la entrega sin conductor tendrá un gran impacto para los californianos en los próximos años. “Un padre en Mountain View podrá recibir los comestibles de la semana sin meter a la familia en el coche. Una abuela en East Palo Alto obtendrá acceso a servicios de entrega a domicilio asequibles de sus necesidades diarias. Y una mujer joven en San José tendrá la oportunidad de comenzar una nueva carrera supervisando la operación de una flota de vehículos sin conductor que cumplirá todas estas promesas”.
Por su parte, Steve Gordon, Director del DMV, asegura que la emisión del primer permiso de despliegue es un hito importante en la evolución de los vehículos autónomos en California. “Seguiremos teniendo en cuenta la seguridad del público automovilístico a medida que se desarrolle esta tecnología”.
Sin embargo, Nuro mira más allá de la entrega de pedidos a nivel local. Recientemente la compañía anunció la adquisición de Ike, una startup de camiones autónomos, y explora las posibilidades publicitarias de estos nuevos vehículos inteligentes. Entre algunas de las patentes presentadas, se detalla cómo podrían funcionar los anuncios en el costado de un vehículo autónomo mediante un sensor que recogería información sobre su entorno y luego mostraría un anuncio en el costado del vehículo basado en esos datos. Si estuviera lloviendo el vehículo podría mostrar publicidad de paraguas.
