‘Permacrisis’, término que alude a un periodo prolongado de inestabilidad e inseguridad, ha sido seleccionado como la Palabra del Año de 2022 por el Collins Dictionary. La firma editora del diccionario considera que el concepto encarna a la perfección la sensación vertiginosa vivida en los últimos meses de pasar de un evento sin precedentes a otro, mientras se cuestiona qué nuevos horrores podrían estar a la vuelta de la esquina.
"La década de 2020 ciertamente ha visto una buena cantidad de agitación, ¡y solo llevamos dos años! En este tiempo hemos tenido que lidiar con una pandemia y sus secuelas, una nueva guerra brutal en Europa y, en el Reino Unido, una crisis económica de la que el Banco de Inglaterra advirtió sobre un "riesgo material para la estabilidad financiera. También hemos tenido tres primeros ministros, hasta ahora", explica David Shariatmadari, autor de “Don’t Believe A Word: From Myths to Misunderstandings – How Language Really Works” en el blog oficial de la compañía editorial.
Por todo este cúmulo de circunstancias, Collins considera apropiado que ‘permacrisis’ destaque como la Palabra del Año sobre una lista a la que la compleja coyuntura ha contribuido a dar forma. Así, las turbulencias políticas, económicas y sociales en Reino Unido, cuyas ramificaciones aún se están desarrollando, han encontrado un hueco entre los términos más relevantes de 2022.
Lo hacen con la palabra 'Partygate', en alusión a los escándalos protagonizados por el ex Primer Ministro Boris Johnson relacionados con la celebración de fiestas en el 10 de Downing Street durante los confinamientos por coronavirus. Asimismo, el fallecimiento de la reina Isabel II el pasado mes de septiembre ha dado paso a una nueva era en la monarquía británica, que liderará el nuevo rey, Carlos III, y que inicia el periodo 'Carolino", derivado del latín medieval de Carlos, Carolus.
La invasión de Ucrania por parte de Rusia también ha moldeado la lista de palabras de este año. Las principales repercusiones léxicas del conflicto bélico se han encontrado en que todo el planeta ha aprendido rápidamente la ortografía y la pronunciación ucraniana de la ciudad de Kyiv; así como en la extensión del uso adaptado del concepto “lawfare”, que alude al empleo estratégico de los procesos e instituciones legales y jurídicas para desgastar a adversarios políticos.
El conflicto entre Ucrania y Rusia también presenta ramificaciones en una crisis energética que ha dado lugar a la palabra “warm banks” (bancos cálidos o bancos de calor). Tomando como referencia el concepto “banco de alimentos”, los denominados bancos cálidos se entienden como lugares donde aquellos que carecen de los recursos o capacidades para calentar sus propios hogares pueden reunirse en caso de una ola de frío, como bibliotecas, museos, asociaciones sin ánimo de lucro o instituciones locales.
En el lado opuesto de la emergencia energética y climática, las altas temperaturas históricas registradas este verano en Europa han incrementado el uso de la palabra “splooting”, que se refiere, según explica Collins, al acto llevado a cabo por los animales de acostarse boca abajo con las piernas estiradas como fórmula para refrescarse.
Asimismo, en el ámbito social el Collins Dictionary ha incluido “quite quitting” (renuncia silenciosa) entre la lista de Palabras del Año 2022. Entre las consecuencias de la pandemia destaca un cambio cultural en el terreno laboral caracterizado por una mentalidad más vinculada a la calidad de vida, que al progreso profesional. La compañía editorial sostiene que esto ha llevado a los llamados abandonos silenciosos, que implican “no hacer más trabajo del que uno está obligado por contrato a hacer”.
Por último, el deporte, aunque en clave negativa, también ha encontrado su hueco en la lista. El concepto “sportswashing”, que se apoya en la palabra “greenwashing” para definir el blanqueo de la imagen y la reputación a través del deporte, ha cobrado importancia en los últimos meses ante la celebración de la Copa Mundial de la FIFA en Qatar y el uso que este país ha hecho de la competición internacional para diluir las preocupaciones sobre los derechos humanos y el bienestar de los trabajadores migrantes.