Sam Altman, CEO de OpenAI, ha aprovechado el comienzo del nuevo año para reflexionar sobre el camino recorrido con ChatGPT y su compañía desarrolladora, así como aventurar qué depara el futuro a la inteligencia artificial. Ha recogido sus reflexiones en un blog personal que resultan interesantes para acercarse un poco más a la visión de una de las figuras que están liderando el desarrollo tecnológico a nivel global. 

El directivo ha sido ido protagonista de la conversación social en los últimos días a consecuencia de la denuncia por abuso sexual interpuesta por su propia hermana. Altman cuenta con el apoyo de su familia que, en una declaración conjunta compartida en X, ha aludido a los problemas de salud mental de Annie Altman y a su historial previo exigiendo soporte económico a través de diferentes vías. 

En su reflexiones publicadas el pasado 6 de enero, Altman ha compartido sus pensamientos acerca del crecimiento de ChatGPT, sus sentimientos acerca de su despido de la compañía y ha analizado algunos de los desafíos a los que se enfrenta la organización. 

No obstante, uno de los puntos más destacados de sus reflexiones es el panorama que ha dibujado sobre los agentes de inteligencia artificial, de los que asegura que podrán “sumarse a la fuerza laboral y cambiar materialmente el rendimiento de las empresas” este 2025.  “Seguimos creyendo que poner iterativamente grandes herramientas en manos de las personas conduce a grandes resultados ampliamente distribuidos”, ha señalado en relación a las aportaciones que prevén harán este tipo de soluciones. 

Asimismo, ha explicado que OpenAI apunta hacia la superinteligencia en el sentido más amplio del concepto. “Las herramientas superinteligentes podrían acelerar enormemente el descubrimiento científico y la innovación mucho más allá de lo que somos capaces de hacer por nuestra cuenta y, a su vez, aumentar enormemente la abundancia y la prosperidad”, ha comentado Altman, aludiendo a su ambición más allá de sus actuales productos. 

Reconoce también que el concepto de superinteligencia puede sonarle a muchos como algo de ciencia ficción, pero asegura que es hacia donde se dirige no sólo la visión de OpenAI sino el trabajo del ecosistema empresarial de la inteligencia artificial en general. También ha señalado que es importante avanzar y actuar con cuidado, pero sin dejar de maximizar los beneficios de la tecnología y el empoderamiento que brinda. 

ChatGPT, OpenAI y el despido

Altman también ha reflexionado en su publicación sobre ChatGPT, herramienta a la que califica como un punto de inflexión en la revolución de la IA y de la que asegura que ahora está mostrando algunos de los enormes beneficios que siempre se ha esperado de la IA. 

Además, el directivo ha analizado la construcción de OpenAI. “Construir una empresa a tanta velocidad con tan poca capacitación es un proceso complicado. Los errores se corrigen a medida que avanzas, pero realmente no hay manuales ni pautas cuando estás haciendo un trabajo original”; ha apuntado. “Moverse a toda velocidad en aguas desconocidas es una experiencia increíble, pero también es inmensamente estresante para todos los participantes. Abundan los conflictos y los malentendidos”.

Altman asegura que la compañía ha experimentado desafíos en términos de rotación y capacitación del talento, y también ha aludido a ataques externos relacionados con la competencia y su liderazgo en la categoría. Ha reiterado el compromiso de OpenAI con la investigación y el avance en la IA, así como con la seguridad y la distribución de beneficios. 

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“Nuestra visión no cambiará; Nuestras tácticas seguirán evolucionando”; ha dicho. “Hay cosas nuevas que tenemos que empezar a crear ahora que no entendíamos hace unos años, y habrá cosas nuevas en el futuro que ahora apenas podemos imaginar”. 

Respecto a su despido ha comentado que se trató de una “sorpresa” que inició unos días "realmente locos". Considera que todo el proceso fue “un gran fracaso de gobernanza”. “Mirando hacia atrás, ciertamente desearía haber hecho las cosas de otra manera y me gustaría creer que soy un líder mejor y más reflexivo hoy que hace un año”, ha apuntado. 

De ello asegura haber aprendido la importancia de una junta con puntos de vista diversos y una amplia experiencia en la gestión de un conjunto complejo de desafíos. “Una buena gobernanza requiere mucha confianza y credibilidad. Aprecio la forma en que tantas personas trabajaron juntas para construir un sistema de gobernanza más sólido para OpenAI que nos permita perseguir nuestra misión de garantizar que la inteligencia artificial general beneficie a toda la humanidad”.