Trabajar en Estados Unidos le ha dado a Miguel Ángel Torres una mayor fortaleza y un fuerte impulso para sacar adelante nuevos proyectos fuera y en España. Miguel Ángel es director general de We are the Blend.
Torres asegura que “en otros mercados te das cuenta del alto nivel que tenemos y, además, creas atributos nuevos dentro, a todos los niveles”.
Así lo comentaba junto a Jaime Antoñanzas (Comunica + A) y Miguel Olivares (La Despensa) en un encuentro organizado por Agencias de España y Dir&Ge. Los tres publicitarios compartieron sus experiencias de internacionalización y confesaron algunos de los errores cometidos. Lo hicieron en la jornada “Aciertos y errores de tres empresarios que han triunfado dentro y fuera”.
Todos se mostraron de acuerdo en que “salir te hace ser mejor”. Sin embargo, todo conlleva un riesgo. En su intervención, Jaime Antoñanzas enumeró un decálogo de los errores más comunes que suelen cometerse en los procesos de internacionalización de las agencias:
1. Hacer la creatividad desde la central, asumiendo que lo que es bueno aquí lo será allí.
2. No dar acciones al que está en el otro país. Es importante que el que está allí partícipe del éxito y cubrirle cuando las cosas van mal.
3. Fijar un sistema de confianza que no esté basado en el control desde el principio. No incluir mecanismos de reporte claros desde el inicio es un riesgo.
4. Pensar que ser español basta, cuando nuestra nacionalidad ya no está de moda.
5. “Mandar un españolito que mande”. Se recomienda que la cabeza de la empresa sea un local y en segundo lugar poner a un español.
6. Comprar una agencia y no enamorar. Es importante entender la realidad como personas, viendo en las compras algo más que una relación financiera.
7. No cerrar a tiempo, no aceptar que a veces las cosas salen mal.
8. Pretender tener exactamente el mismo posicionamiento que aquí.
9. Aceptar una agencia que no tiene nada que ver con la mía.
10. No cometer errores, no intentarlo.
Eso sí, Jaime Antoñanzas se mostró de acuerdo con Miguel Ángel Torres en los beneficios no sólo económicos que supone la internacionalización. “Salir es un chorro de ilusión”.