Twitter ha pasado a un tercer plano. Las dos redes sociales más usadas en España son Facebook e Instagram. Según datos de la VIII oleada del Observatorio de redes sociales, de Arena Media y The Cocktail Analysis, la penetración de usuarios de redes sociales en España se mantiene estable desde 2011, con un 91% en 2016.
Los españoles se conectan de media seis horas diarias siendo Whatsapp y Facebook sus favoritas. Y como novedad destaca Instagram, que ha desbancado a Twitter en la segunda posición de redes sociales más usadas, con un 41% de penetración.
No more postureo
Según el Observatorio, cabe señalar la irrupción de la autenticidad y la espontaneidad en las redes sociales, frente al postureo latente en 2015. Esta nueva corriente se sustenta a través de formatos como los vídeos efímeros – Snapchat e Instagram Stories – en los que prima la naturalidad porque los usuarios se aseguran que dichos contenidos se destruyen y no dejan rastro.
Se trata de una actitud de búsqueda de control de su “yo-persona”, frente a la adaptación de su “yo-consumidor” que acepta compartir información con las marcas. En este sentido, el Observatorio distingue cuatro perfiles de usuarios, según su interacción con las marcas:
- Outsiders, usuarios con relación básica o nula con las marcas
- Curiosos, siguen a las marcas para estar al tanto de tendencias y novedades del sector
- Clientes, siguen a la marca para conocerla en profundidad
- Entusiastas, aquellos que consideran que el valor trasciende de la marca al contenido
En este sentido, las marcas deben ajustar su tono a cada momento y a cada una de las redes sociales, adecuar el tipo de contenido a cada plataforma y trabajar los valores que se transmiten en cada red social.
Por último, el estudio señala la expansión de los servicios de mensajería instantánea y las posibilidades de estos soportes para las marcas. Se constata el uso frecuente de estas apps como micro-redes sociales.
Y es que el usuario se muestra atraído por las comunicaciones de las marcas en estos medios siempre y cuando tengan una utilidad muy concreta y no violen este espacio privado. Por ejemplo, el 45% de los encuestados valoraría como muy interesante que una empresa de mensajería les informase sobre el estado de su pedido vía WhatsApp.