Toda estrategia publicitaria debe seguir la misma línea y tener unidad en toda su comunicación. No podemos lanzar mensajes a los consumidores que no tengan nada que ver el uno con el otro. Y, por supuesto, debemos plantear y organizar la estrategia lo mejor posible desde el principio, que luego nos encontramos casos como éste de Reebok.
En el mundo del Social Media, todo lo anterior también es aplicable: no podemos abrir una cuenta en Facebook, en Twitter o en cualquier otra red social cada vez que se nos apetezca, sin unidad, así porque sí, y crear tal descontrol no sólo para la empresa, sino también para sus consumidores.
¡Deberían crear un "Facewash" para marcas para ahorrarles tiempo en situaciones como ésta!
La identidad de una marca en las Redes Sociales debe obedecer a una estrategia única y común, a pesar de que la firma tenga presencia en todo el mundo. Lanzar páginas y perfiles para todo no es una buena idea, tal y como ha aprendido Reebok.
La presencia de esta marca deportiva en las Redes Sociales era muy amplia, ya que los responsables de marketing en cada país abrían páginas en Facebook para cada campaña y perfiles en Twitter para cada producto. Una infinidad de canales de YouTube fueron creados para compartir contenidos de la firma.
Tyler Bahl, global brand engagement-media manager de Reebok desde hace dos años, supo que había un problema y que era necesario hacer una limpieza, según AdAge.
Una auditoría interna identificó unas 600 cuentas de la marca en redes sociales (Facebook, Twitter y YouTube, entre propias y creadas por los usuarios (éstas, el 75%). Aún les quedan casi 400 y siguen intentando recortar.