Así es el supermercado del futuro

  • El prototipo ha sido diseñado por la cadena de supermercados Coop y por la consultora tecnológica Accenture
  • En el supermercado del futuro pueden verse a robots seleccionando la fruta y un espacio diáfano que predispone a la interacción
Han-solo

El supermercado del futuro ya no es solo una invención.

Con películas que nos hablan de misiones en Marte y de parques temáticos donde los dinosaurios son la principal atracción, no estamos muy lejos de visualizar a un Han Solo comprando yogures y a un Will Smith pidiéndole a su robot casero que compruebe las calorías de un plato precocinado.

Y es que en la Expo de Milán ya se ha visto que no estamos tan lejos de ser los protagonistas de estas historias y de encontrarnos frente a un robot que nos seleccione la fruta. Al menos, así lo ve la cadena italiana de supermercados Coop y la consultora tecnológica Accenture que han mostrado juntas el primer piloto del supermercado del futuro.

Robots vendiendo fruta y espacios en los que conectar

Y como en toda visión futurista de la realidad, los robots son un imprescindible. En la sugerencia de Coop y Accenture, son estas maquinarias en forma de brazo hidráulico, las que seleccionan la fruta para nosotros.

Pero solo es un prototipo de demostración. “En el futuro, podrás ordenar tu cesta de fruta personalizada desde la app, para que cuando llegues esté preparada”.

Sin embargo, no todo es tan previsible. Parece que las baldas son cosa del pasado y, por ello, en el piloto los productos están colocados sobre mesas. Una idea que responde a la necesidad de dar la sensación de más espacio para que realizar la compra se convierta en una actividad aún más social. Así que nada de estanterías entre las que esconderse...

Así lo ha explicado Marco Morchio, Director de Gestión Estratégica de Accenture: “Buscamos que los clientes puedan verse las caras, que el supermercado sea un espacio abierto. A la gente le gusta interactuar y queremos que el momento de la compra sea una experiencia en sí misma”.

Unas pantallas muestran toda la información del producto: desde el precio hasta el origen

Pero no todo iba a ser tan simple. Una serie de pantallas que parecen sacadas de la tecnología que utiliza la NASA en el último film de Ridley Scott, proyecta los precios de cada producto situado en las mesas.

Y precisamente esas pantallas pueden ser las que ayuden a más de uno en esos proyectos de dieta abandonados. En ellas se desvelarán los secretos de las fichas nutricionales de cada alimento. Todo gracias a un dispositivo kinético que se activa al presionarlo y que envía la solución a las futuristas pantallas.

Solo hacen falta unos segundos para que nos digan el precio y la información ampliada del producto. Datos que van desde las calorías hasta el origen.

Aunque esto no acaba aquí. La tecnología siempre ha buscado facilitar la existencia del consumidor y ¿por qué no darle las herramientas para que tome el control de su proceso de compra?

Como si de un broker de Bolsa se tratara, cada uno de los clientes de este supermercado del futuro tiene a su disposición información sobre las estadísticas de consumo del centro: qué productos tienen más éxito en cada categoría o cuáles son los que llaman más la atención en los clics. Las acciones, entonces, podrían medirse mediante granos de arroz.

¿Cuándo lo veremos?

Aunque se trata de una visión propia de un futuro cercano, algunos expertos no son muy optimistas respecto a su llegada. “Tardará porque por ahora la distribución sigue enfocada a reducir los precios y el sector aún no está en condiciones de hacer grandes inversiones”, ha explicado Francesc Valls, Catedrático de Marketing de ESADE.

Pero no os deprimáis. Según ha afirmado Valls podremos ver sorpresas que apunten a la robotización en los próximos cinco años.

Y es que, si Ikea ya ha imaginado la cocina del futuro, tendremos que comprar en un supermercado digno de ella ¿no?