La competencia dentro del sector del transporte ha obligado a los taxistas a renovarse. Por eso se han aliado con Outo para ofrecer precios cerrados a su consumidores, que sabrán el importe total antes de montarse en el taxi.

Con Outo el usuario accede a la aplicación o web, selecciona su destino y el sistema le muestra un mapa con la mejor ruta, el tiempo y el importe que le costará el servicio. Tras hacer clic el sistema envía al taxista más cercano a realizar el servicio. El taxista no cobra nada al cliente, que paga a través de la aplicación el importe indicado antes de iniciar la ruta.

El objetivo de este sistema es permitir al sector recuperar parte de la clientela perdida con Uber y Cabify. El uso de la plataforma tiene un coste de cincuenta céntimos + IVA por servicio, tanto para taxista como para usuario. La aplicación usa un algoritmo que calcula y tiene en cuenta el día (festivo o no), la hora y el tráfico. Así calcula el precio basado en las tarifas oficiales de cada región, y ese es el precio a pagar, siempre a través de la App y nunca al taxista.

El servicio se encuentra actualmente en fase de pruebas y se estrenará oficialmente el próximo 5 de marzo.