La agrupación de periodistas de UGT ha solicitado al Gobierno que retire la publicidad sexual en los periódicos españoles. Y es que recientemente el Ejecutivo ha publicado su nuevo plan de lucha contra la trata de mujeres y niñas, en el que no incluye poner fin a este tipo de anuncios en los periódicos españoles.
De esta forma el Gobierno no quiere obligar a los medios de comunicación a prescindir de los anuncios de prostitución. La razón podría ser que este tipo de publicidad es una gran fuente de ingresos para los medios de comunicación, que según los últimos datos obtenidos en 2007 ganan 40 millones de euros por ofrecer servicios sexuales entre sus páginas.
Asimismo ha indicado que hay publicaciones que no dan cabida a la publicidad sexual como el 20 Minutos o La Razón y que "están aguantando la crisis económica, especialmente intensa en la inversión publicitaria en papel".
Petición directa a los periódicos españoles
UGT ha tachado de “intolerable” que aún existan periódicos que den visibilidad a la prostitución y que grandes medios españoles no respeten los derechos humanos y defiendan el proxenetismo. "Entendemos que todo no vale para la financiación de las empresas periodísticas”, ha señalado el sindicato.
Por esta razón hace un especial llamamiento a cada uno de los medios de comunicación impresos para que ayuden a eliminar estas fórmulas que fomentan la trata de mujeres y menores y que aplauden la explotación sexual.
El texto presentado por el Gobierno se queda un poco corto a la hora de no vulnerar los derechos humanos. El plan presentado apoya la "promoción de la suscripción de códigos de autorregulación". Por lo tanto, el sindicato ha denunciado que “la autorregulación no va a conducir a poner punto y final a este tipo de publicidad".
Reason Why ha hablado con Rafael Moyano, Director de Comunicación de Unidad Editorial y nos ha comunicado que están valorando la posibilidad de eliminar definitivamente esta clase de anuncios de su periódico El Mundo, la única cabecera de la casa que hoy en día contiene anuncios de servicios sexuales. Aún así, "es un poco cínico prohibir los anuncios de actividades que realmente no están prohibidas ni perseguidas. La Ley no ha incidido sobre ello y no sólo somos los periódicos los que damos este tipo de contenidos; también la televisión, internet...", ha objetado Moyano. Y es que el debate lleva muchos años sobre la mesa, el motivo de su publicación responde a intereses meramente económicos. Pero Rafael ha apuntado que el porcentaje por ingresos es bajo aunque dentro de la categoría de anuncios por palabras, éstos, conforman un número bastante elevado.
De todas formas su Dircom, ha confesado que hace unos años se rebajó el tono y se suavizaron los contenidos de los anuncios pornográficos para no infringir la ética profesional del medio.
Por su parte, La Razón no ha querido hacer declaraciones respecto a la polémica pero ha apuntado que hace muchos años que la empresa decidió dar un giro a la línea editorial del periódico y esto provocó que los anuncios pornográficos desaparecieran de sus páginas.
