¿Van a desaparecer los Donuts de Panrico?

Panrico tiene 5 puntos débiles responsables de sus problemas financieros. Los Donuts son uno de esos 5 puntos. Analizamos la situación de la empresa y la viabilidad de su producto estrella.

A finales de septiembre de 2013 conocimos las dificultades financieras de Panricoque ponían en entredicho la viabilidad de la empresa. Los Donuts eran, y son, su producto estrella pero su posible desaparición estuvo en boca de todos. Hoy, casi 5 meses después, esta cuestión sigue preocupando a los consumidores.

Desde Reason Why analizamos hasta qué punto es posible la desaparición de los Donuts de Panrico.

Vamos a recorrer la trayectoria de la marca desde el anuncio de su polémico ERE para valorar si los Donuts tienen o no viabilidad comercial en los estantes de los supermercados.

Las pérdidas de 2013 pasaron factura

Panrico ingresó 297 millones de euros en 2013, un 17,38% menos que el año anterior. Además, acumuló unas pérdidas de 5,3 millones de euros en el mismo ejercicio.

Todos sus productos, menos La Bella Easo, registraron una disminución de sus ventas. Estos números son consecuencia de un modelo de estructura de costes ineficiente y de la cada vez mayor competencia de las marcas blancas.

La compañía consideró el ERE como la única medida posible para hacer frente a esta difícil situación financiera. El 25 de septiembre de 2013 Panrico anunció su ERE, que afectaría a 1.914 personas, casi la mitad de su plantilla, y supondría la bajada del sueldo de sus empleados entre un 35 y un 45%.

“Panrico en lucha”, el ERE que desembocó en huelgas

UGT y CCOO convocaron la huelga indefinida el 13 de octubre de 2013 en todos los centros de Panrico para reclamar, sobre todo, el pago de la nómina de septiembre. Los 1.900 autónomos que trabajaban para Panrico no se vieron afectados por esta convocatoria.

 

 

La interrupción de la actividad de sus plantas no se extendió demasiado en el tiempo a excepción de la de Santa Perpètua (Barcelona) que acumula ya más de 121 días de huelga. Este 13 de febrero la empresa se verá la cara con el comité de huelga en el Juzgado de lo Social número 3 de Sabadell por la denuncia que Panrico ha interpuesto, La marca reclama 5 millones de euros por las pérdidas que está generando la parálisis de la fábrica catalana. 

Durante los días que duraron las diferentes huelgas en el resto de plantas, los estantes de los supermercados, bares y panaderías amanecieron vacíos durante algunos días. Ni Donuts ni Bollycao. La movilización de sus trabajadores durante los días siguientes al anuncio del ERE fue total y provocó la paralización de la actividad de sus plantas. Los Donuts no se podían distribuir. 

El acuerdo final

Finalmente se ha llegado a un acuerdo con los sindicalistas de todas las plantas, menos la de Santa Perpètua. De los 2.000 puestos totales, se eliminará un máximo de 745 hasta 2016, las indemnizaciones por despido se elevan de 23 a 25 días de salario por año de trabajo (con un máximo de 14 mensualidades) y el sueldo de los trabajadores que siguen en Panrico se reducirá hasta un máximo del 15% para los años 2014, 2015 y 2016. 

A día de hoy ya han salido más de 200 personas por razones de edad, alto coste o extinción del contrato de trabajo. En el caso de los autónomos se ha programado la salida de 300 personas de las 1.900 que trabajaban para Panrico.

Más allá del ERE: el Plan de Viabilidad de Panrico y sus 5 puntos débiles

Según Carlos Gila, consejero delegado y representante del fondo de inversión Oaktreeque posee el 100% de Panrico desde 2013, ya se ha puesto en marcha un Plan de Viabilidad cuyos frutos pretenden recogerse en 2017. Sin embargo, esperan poder empezar a hablar de datos positivos en un plazo de 12 meses. 

Este plan es el resultado de un análisis empresarial del grupo en el que se detectaron 5 puntos débiles responsables de hacer flaquear sus estructuras financieras:

 

Panrico ya ha emprendido medidas para subsanar 4 de los 5 problemas. A pesar de los costes elevados que supone la fabricación y distribución de los Donuts y de la creciente competencia de las famosas rosquillas, los de Panrico han decidido no atacar este punto débil de momento. O, al menos, eso es lo que dicen. El producto estrella de la marca se mantiene intacto.

Su competencia (Hacendado y Dulcesol), con anterioridad a estas medidas, fijaban el precio por kilo de los donuts en 4,8 € a diferencia de los 9,7 € de Panrico. Por tanto, sorprende la decisión de la empresa de no responder directamente a las estrategias de sus competidores, considerando además que el 60% de las ventas de Panrico pertenece a la división “bollería”, en la que los Donuts representan el 30% de la facturación.

De verdad, ¿nada de nada en lo que a Donuts se refiere? 

Eso nos preguntamos en Reason Why después de conocer que Donuts, además de su producto estrella, es uno de los 5 causantes de los problemas financieros de Panrico. Así que decidimos preguntar: ¿La política de producción y distribución de Donuts desde Panrico sigue siendo la misma? ¿Los Donuts corren peligro?

Las delegaciones de Panrico con las que hemos contactado nos han comunicado que no les ha llegado ninguna nueva directriz desde arriba en lo que a la fabricación y distribución de Donuts se refiere. Siguen con su actividad habitual. Desde Panrico han preferido no pronunciarse sobre posibles modificaciones en la estrategia comercial de sus Donuts.

Menos visitas

Sin embargo, hemos podido saber que la periodicidad de visitas de los repartidores es menor. Según el responsable de la delegación de Panrico en Vitoria, ahora deciden con qué periodicidad abastecer a los establecimientos que venden Donuts en función de sus volúmenes de ventas. 

“La modificación en la periodicidad de visitas de nuestros repartidores supone un ahorro para Panrico que repercute directamente en las tarifas de mercado”. - Responsable de la delegación de Panrico de Vitoria.

Este trabajador también ha querido apuntar que la fábrica y distribuidora de San Sebastián sigue con su producción diaria con total normalidad.

Menos cantidad 

Por otro lado, hemos sabido que el servicio de las delegaciones catalanas está más perjudicado que el de las plantas del País Vasco. Según la delegación de Manresa (Barcelona), que se encarga de distribuir (no fabricar) el producto estrella de Panrico, cuentan con “problemas de abastecimiento” porque desde la huelga iniciada en Santa Perpètua no les llega la cantidad de Donuts que debería. 

“Hay algunos productos cuya fabricación y distribución no se ha normalizado”, apunta un trabajador de Manresa. Pero sí siguen recibiendo y distribuyendo Donuts.

La historia de Panrico es la historia de una empresa familiar cuyo crecimiento le ha venido grande y ha necesitado de ayuda externa para estabilizar su situación financiera y salir airosa de la operación. 

El plan de viabilidad con miras a 2017 no debería resultar en una decisión estratégica errónea, como ya ocurrió en 2010. En aquel momento Panrico tuvo que rectificar y volver a hacer Donuts recién horneados después de una fuerte inversión en I+D en 2009 para posicionar en el mercado Donuts envasados que se conservaban mejor y les permitía ahorrar en costes de distribución

Panrico únicamente ha declarado que están contemplando la posibilidad de comercializar Donuts congelados, tal y como hace su competencia, esquivando así uno de sus principales escollos: los altos costes que supone la fabricación y distribución de Donuts frescos. 

Todo apunta a que los Donuts, tal y como los hemos conocido, seguirán existiendo en términos comerciales.