Así afecta el internet de las cosas al Marketing

Es un hecho que el concepto “internet de las cosas” ha llegado para quedarse. Pero la pregunta es, ¿cuándo se instalará definitivamente?

Jonathan Nelson, CEO de Omnicom Digital, publicaba recientemente un tuit diciendo que “La televisión ha dejado de evolucionar. El Internet de las cosas la reemplazará”.

Esta impactante afirmación da para reflexionar sobre qué está pasando alrededor de la publicidad, la tecnología, el marketing… En este sentido, Forbes ha recogido algunos puntos a los que el CEO estaba aludiendo con esa afirmación y ha dado una serie de recomendaciones a las empresas si no quieren quedarse estancadas frente a este nuevo paradigma.

  • La innovación de dispositivos se está desacelerando: La evolución de los dispositivos basados ​​en pantallas, desde televisores a teléfonos móviles, está alcanzando un máximo natural. Es decir, las nuevas características e innovaciones como 3D, 4K, pantallas de retina o pantallas táctiles son avances muy interesantes para el sector pero no modifican la funcionalidad de estos dispositivos electrónicos.
  • El internet de las cosas prolifera: Termostatos, cerraduras, coches, cafeteras… un mundo donde todo esté conectado a internet es posible. Será toda una revolución. Están por venir aparatos con la máxima tecnología y diseño que les permitirá estar conectados y se modificará su funcionamiento.
  • El desafío para las marcas es cambiar los anuncios por la experiencia del usuario: Las pantallas del futuro serán pequeñas, funcionales y diseñadas para tareas específicas. Ya no serán grandes y espaciosas como una pantalla plana o una tablet. Por ejemplo, el nuevo mando de un Audi será más parecido a un iPad e incluso podría llevar fácilmente anuncios de alimentos, compañías de gas u otro minorista en un futuro no muy lejano. El desafío para las firmas está, a nivel creativo, en su capacidad de crear un anuncio para que el mensaje encaje en el contexto de estas pantallas del futuro.

Este nuevo panorama transformará a las empresas tradicionales de publicidad.
El eslogan y el spot de 30 segundos seguirán existiendo, pero que la marca consiga la fidelización de los consumidores es algo que vendrá marcado por el valor añadido que estas ofrezcan respecto a sus competidoras.

Por ejemplo, coches inteligentes vs. coches tradicionales o  relojes inteligentes frente a simples relojes… ¿Con cuál nos quedamos? La respuesta es fácil…

Teniendo en cuenta estos factores, la marcas tienen que empezar a innovar y prepararse para las próximas ferias tecnológicas, como el CES Las Vegas de 2016.

Estos son los tres puntos donde Forbes recomienda a las marcas que deberían poner el foco de atención.

Personificar el producto
Lo millones de vídeos de gatitos  y las máquinas Nespresso han demostrado que son productos con personalidad. Cuando el consumidor interactúa con un producto necesita obtener una experiencia de marca que les una.

Eso significa que todo, desde las instrucciones de uso hasta el diseño del packaging, tiene que encajar con el storytelling de la marca.

Invertir en mensajes individuales
Los anuncios seguirán funcionando y las marcas tendrán que seguir invirtiendo en publicidad, pero deberían conseguir ponerlos delante del consumidor adecuado. Un mensaje tipo que sea homogéneo no es suficiente. Será necesario incrementar la creatividad de los anuncios para dirigirlos a públicos distintos.

Ofrecer servicios inesperados al producto principal

Como hizo Apple con Siri, o la "botella inteligente" de Johnnie Walker Blue Label, que añaden valor a sus productos con algo que les diferencia del resto.

Si las compañías toman nota de todas estas premisas puede que el internet de las cosas esté más cerca de lo previsto.