John McAfee, gurú de la ciberseguridad, se ha ofrecido a descifrar los datos que el FBI quiere extraer del iPhone de la discordia, un dispositivo que se encontró en el vehículo de uno de los autores de la matanza de San Bernardino. Pero hay una condición: que no se instalen “puertas traseras” en el dispositivo.
Apple se ha negado a consentir las peticiones del FBI. Unas peticiones que ahora podría hacer realidad este polémico paladín de la ciberseguridad: “Esta es mi oferta al FBI. Yo, de forma gratuita, descifraré la información del teléfono de San Bernardino con mi equipo. Nos llevará tres semanas. Si aceptan mi oferta, no tendrán que solicitar a Apple la instalación de una puerta trasera en su producto, que sería el principio del fin de América”.
La privacidad, por encima de todo
Y es que muchos son los que se posicionan a favor de la privacidad. De hecho, Google, WhatsApp y Twitter ya han mostrado su apoyo a la negativa de Tim Cook para crear un software que permita el acceso, incluso inalámbrico, a sus dispositivos.
Una medida que, en palabras de McAfee, traería muchos problemas: “Si el Gobierno tiene éxito en conseguir esta puerta trasera, con el tiempo se conseguirá que todos los avances en encriptación hayan terminado. A pesar de que el FBI afirma que protegerá el acceso privado, todos sabemos que es imposible. Tan solo unos cuantos millones de dólares serían necesarios para que los enemigos del país puedan tener pleno acceso a los secretos nacionales”.
McAfee está convencido de su éxito. Y es que según ha afirmado trabaja con los mejores hackers del planeta.
La pregunta es: ¿serán capaces de descifrar la contraseña que protege el iPhone antes de introducirla de manera errónea diez veces? Algo que activaría el borrado automático de toda la información que quiere el FBI...