Hoy en día las marcas no quieren saber sólo qué compramos. Quieren saber cómo compramos.
La compañía de software Prism Skylabs Inc ha diseñado una nueva tecnología capaz de analizar el comportamiento del consumidor.
Las grabaciones de las cámaras del establecimiento analizadas en tiempo real permitien identificar dos aspectos relevantes del comportamiento de los clientes en el punto de venta:
- Por qué zonas de la tienda caminan.
- En qué productos se detienen y en cuáles no.
El comerciante podrá ver en tiempo real todo lo que está ocurriendo en la tienda desde su ordenador, smartphone o cualquier dispositivo móvil.
Y a partir de esas imágenes Prism elaborará un mapa de calor con el comportamiento de los clientes de cara a la disposición y la elección de los productos.
Betabrand es una marca de ropa que ha probado esta innovadora tecnología en su tienda de San Francisco. El mapa de calor dibujado en el suelo del establecimiento muestra el tráfico del público alrededor de los productos. El rojo hace referencia a las zonas en las que ha caminado o se ha detenido más gente. Frente al verde que muestra las zonas con menos tránsito y atención de los clientes.
En cuanto a las machas azules, sugieren que casi nadie ha pasado por ahí.
Esta información puede ser extremadamente útil para los comerciantes. No sólo para conocer qué productos gustan más o llaman más la atención. Si no también para saber cuáles son las mejores zonas de la tienda para colocar una promoción o colocar los artículos que mejor se están vendiendo.
STORY es una tienda de Nueva York que también ha implementado la tecnología en su establecimiento. El azul es el color predominante del mapa de calor dibujado en el suelo, lo que significa que apenas hay tráfico de gente. Por tanto, la disposición de la tienda o de los productos debe cambiar.
El estudio del movimiento de los clientes en las tiendas no es algo nuevo. Es muy conocido el hecho de que las personas nos sentimos más atraídas por los productos colocados a la derecha de un pasillo en el supermercado.
Pero la tecnología que propone Prism pretende ir un paso más allá. También ha creado unos mapas que recogen la actitud de los clientes con los productos. Cuáles tocan más y cuáles menos.
Conocer esto es importante porque los productos que más se tocan son los que más posibilidades tienen de ser vendidos.
Pero esta conclusión no es la única que se puede sacar de estos mapas de calor de consumo. También permite la posibilidad de analizar la estrategia de pricing de la tienda.
Por ejemplo, un producto que mucha gente toca pero que casi nadie compra podría ser una señal de que es demasiado caro.
O quizá un artículo que nadie toca, pero que está situado en un mueble en el que el resto de productos sí tienen éxito. Lo más aconsejable sería retirarlo y buscarle una nueva posición en la que sí pueda triunfar.
Este es el mapa de calor de productos de Betabrand, la tienda de San Francisco.
Y este es el mapa de calor de la tienda STORY, de Nueva York.
En ambas fotografías se puede apreciar cómo las esquinas tienen más éxito que las zonas centrales de las mesas.
Aunque la tecnología de Prism ya ha sido probada, aún no hay datos oficiales del impacto en las ventas de los establecimientos que la han implantado.
