A lo largo de los últimos meses se ha podido observar un cambio en la estrategia de marketing de Tesla, que ha apostado finalmente por la publicidad con el objetivo de impulsar las ventas de sus vehículos. Sin embargo, la creciente competencia en el terreno de los coches eléctricos y la contención del gasto entre los consumidores ha obligado a la compañía a reducir su plantilla a nivel global en aproximadamente un 10%.
El equipo de marketing estaba formado por uno 40 profesionales
Entre los despidos ejecutados se encontraría el departamento de marketing de Estados Unidos, formado recientemente como parte del impulso a la comunicación comercial tradicional llevada a cabo por Elon Musk. Así, según informe Bloomberg, el equipo estadounidense de “growth content”, formado por unos 40 profesionales y liderado por Alex Ingram, habría sido eliminado como parte de las reducciones de plantilla.
Además, el citado medio también señala que se habrían producido despidos en el área de diseño. Con todo, la automovilística todavía contaría con un equipo de marketing en Europa.
Más allá de la coyuntura económica y de la industria, el desempeño del equipo también podría haber influenciado la decisión. El propio Elon Musk, CEO de la compañía, ha comentado en redes sociales que los anuncios ejecutados por la marca eran “demasiado genéricos” y que podrían haber aludido “a cualquier coche”.
Estos despidos suponen un retroceso en las iniciativas publicitarias de Tesla, que hasta hace unos meses se mostraba reacia a la publicidad. Hasta el momento, la compañía había construido su trayectoria en tradicional boca-oreja o las propias publicaciones sociales de Musk, pero en marzo del año pasado Musk adelantó su voluntad de activar anuncios. "Probaremos un poco de publicidad y veremos cómo funciona", comentó en marzo de 2023, señalando que la intención de la compañía era promover nuevas características de sus automóviles, así como anunciar la asequibilidad de sus vehículos.
La apuesta por la publicidad es algo que los inversores han solicitado a medida que se han ralentizado las ventas globales de vehículos eléctricos y más agentes se han adentrado en la categoría. Cabe destacar, además, que la confianza de Musk en los anuncios coincide en el tiempo con su adquisición de Twitter, ahora X.