La Liga Japonesa de fútbol retomará su actividad en unas semanas después del parón generado por la crisis sanitaria del coronavirus.
Ante la previsión de que los encuentros se realicen a puerta cerrada sin la presencia de aficionados, el silencio será el protagonista en las gradas de los estadios.
Sin embargo, la tecnología ha salido al rescate del ambiente deportivo. La compañía Yamaha ha desarrollado una aplicación para smartphones que permite a los fans que sigan el partido desde la televisión, la radio o formatos online, apoyar a sus equipos.
La aplicación esta conectada en directo con el sistema de sonido del estadio, de manera que los jugadores puedan escuchar las voces de los aficionados que están en casa durante todo el encuentro.
Más ambiente en un estadio vacío
En pruebas recientes realizadas en el Estadio Ecopa de Shizuoka, se instalaron 58 altavoces entre los 50.000 asientos de los que dispone, mientras los usuarios probaban distintas opciones de vítores, cánticos y abucheos.
Como detalle, a pesar de que la aplicación permite distintas reacciones, tanto positivas como negativas, no deja comentar libremente aspectos como las decisiones arbitrales, ya que por el momento los mensajes vienen preseleccionados de antemano.
Yamaha ha declarado al respecto: “Los usuarios podrán ganar un sentido de presencia en el lugar que suceda el evento deportivo". Desde la compañía añaden también que “el sistema ha demostrado su habilidad para crear una atmósfera similar a la de los partidos reales”.
La compañía, por otra parte, ha asegurado que mejorará la app para que se pueda adaptar a otro tipo de deportes o eventos que también se realicen con limitaciones de aforo para los espectadores.
El país ha decidido confiar en la seguridad que ofrece la tecnología para recrear el ambiente en los estadios, después del fracaso de otros países, que se han decantado por métodos distintos. En concreto, en Corea del Sur ha surgido una gran polémica después de que el Seoul FC completase las gradas con “fans” que no eran otra cosa que muñecas hinchables ataviadas con equipación deportiva.
El club ya se ha disculpado mediante unas declaraciones y ha aceptado pagar la multa que les ha impuesto la Liga Coreana.