¿Cuántas imágenes crees que consumes al día? ¿Todas las imágenes capturan tu atención? ¿Qué provocan en ti las imágenes que consumes en diferentes medios? ¿Cómo crees que las imágenes que consumes influyen en tus creencias y en cómo te relacionas?
No buscamos dar respuestas, sino invitar a hacer más preguntas sobre aquello que nos hacen ver, provocar un pensamiento crítico y generar consciencia sobre qué papel ejercen los medios en la percepción de los individuos y en la sociedad en su conjunto.
IN REAL LIFE es un proyecto de Arena Media, que nació a principios del 2024, en el que buscamos entender cómo se configura la realidad en la que vivimos para comprender cómo hemos llegado hasta aquí. Y, junto con Célula Lab, empezamos el viaje que nos lleva a hablar de la era de la imagen y la vida light.
Sección "La era de la imagen y la vida light" del muro de investigación del proyecto In Real Life
Desde tiempos prehistóricos el ser humano se ha expresado de forma visual. A través de imágenes ha reflejado sus costumbres, su modo de vida, sus relaciones… y a través de ellas ha buscado dar forma y construir un relato común de la realidad para entender su contexto.
La primera fotografía data del año 1826 y fue realizada desde la ventana de la casa del fotógrafo francés Joseph Nicéphore Niépce. Y a lo largo del siguiente siglo, a medida que las cámaras se volvieron más asequibles, comenzó a capturarse de forma instantánea y más realista que nunca la vida cotidiana.
Primera imagen digital realizada por Russel Kirsch mediante el escaneo de una imagen de su hijo Walden.
En 1911 la frase “usa una imagen, vale más que mil palabras” fue citada por Arthur Brisbane -uno de los editores de diarios estadounidenses más populares del siglo XX y asesor de Henry Ford- en el evento que celebró el Syracuse Advertising Men’s Club para discutir sobre periodismo y publicidad. Una cita que se convirtió en el credo de nuestra civilización.
Las imágenes fijas se convirtieron en una nueva forma de narrar historias para transmitir el contexto desde perspectivas muy diversas. A través de ellas podemos percibir cómo cada persona y cada medio influye al capturar su realidad, según su experiencia, sus gustos, sus intereses e ideología. Una realidad simplificada según los ojos de quien realiza y de quien consume cada imagen.
John Berger en un fotograma de "Ways of seeing" (BBC, 1972)
Decía el filósofo Ponty, “el mundo está alrededor de mí, no enfrente” (citado por Rigat, L., 2018) y es que hay más realidad alrededor de una imagen que no siempre llegamos a capturar en su totalidad y que ni siquiera somos capaces de intuir. Esto puede sonar algo obvio, sin embargo, olvidarlo, es más común de lo que se piensa. Porque parece que si no se ve no existe. Y lo que se ve tiene la autoridad de ser absolutamente veraz.
Junto con los avances tecnológicos cambiaron para siempre la forma en la que experimentamos el mundo y consumimos la información y el contenido. En 1957, Russel Kirsch -informático estadounidense y creador del píxel- fotografió a su bebé. Fue la primera imagen digital (Fabro, M.E., 2020). Sesenta años después, sólo en 2017, se capturaron 1,2 billones de fotos en el mundo (Moreno, G. 2017). Y la IA ha creado en un año tantas imágenes como las tomadas por las cámaras de fotos en sus primeros 150 años (Merino, M. 2023).
La imagen tiene el poder de captar nuestra atención y de modular nuestro pensamiento ante cuestiones que pueden llegar a ser muy relevantes en nuestras vidas y en nuestro funcionamiento como sociedad.
Por este motivo es importante reflexionar acerca de cómo nos afecta el volumen de imágenes que producimos, difundimos y a las que estamos expuestos en la actualidad. Como explican Alan Salvadó y Jordi Balló en su libro "El poder en escena" (2023), la cantidad de impactos visuales que recibimos nos impide que podamos acercarnos a las imágenes de “forma crítica” y decodificar aquello que tiene una repercusión en cuanto a su alcance estético, formato, calidad, contenido, información o intenciones.
Si tenemos la capacidad de elegir qué queremos ver y a la vez tenemos tanta cantidad de estímulos a nuestro alrededor que nos genera saturación, ¿por qué no empezar a ser más selectivos y a ver aquello que nos hace pensar, aprender y crecer como personas y como sociedad? ¿Qué tipo de imágenes necesitamos para que esto suceda?
Bibliografía:
FABRO, M.E. (2020). Muere Russel Kirsch, creador del píxel y la primera imagen digital. Gaceta UNAM.
MORENO, G. (2017). Este año se capturarán 1,2 billones de fotos en todo el mundo. Statista.
RIGAT, L. (2018). Fotografía contemporánea: la reconfiguración de los modos de representación en el documentalismo. Revista deSignis, vol. 28, pp. 59-73. Federación Latinoamericana de Semiótica.
MERINO, M. (2023). La IA ha creado en un año tantas imágenes como las tomadas por las cámaras de fotos en sus primeros 150 años. Genbeta.
SALVADÓ, A. y BALLÓ, J. (2023). El poder en escena. Motivos visuales en la esfera pública. Galaxia Gutenberg.