Adidas lucha por la propiedad como marca de sus distintivas tres rayas paralelas. Sin embargo, la justicia no termina de darle la razón a la marca alemana. El último en pronunciarse ha sido el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) que ha dictaminado que este diseño de las tres rayas paralelas no tiene “carácter distintivo” porque no permite identificar automáticamente a la marca en todo el territorio comunitario.
La batalla por las tres rayas de Adidas
La batalla judicial por las tres rayas se enmarca en la disputa que Adidas y el fabricante belga Shoe Branding Europe BVBA empezaron en 2009.
Entonces este último intentó registrar en la Oficina Europea de la Propiedad Intelectual (EUIPO) una zapatilla con dos rayas paralelas colocadas en ángulo. Adidas se opuso alegando que se parecía mucho a sus tres bandas paralelas y la EUIPO denegó el registro a la belga hasta en dos ocasiones (2015 y 2016). Sin embargo, en 2009 Adidas tenía registrado como marca comunitaria su logo (tres hojas atravesadas por tres rayas paralelas horizontales), pero no las tres rayas paralelas. Este registro lo solicitó en diciembre de 2013 y la EUIPO dio su consentimiento, pero en esta ocasión fue la belga quien se opuso alegando que ellos no habían podido registrar las dos rayas. Esto llevó a la EUIPO a cambiar de opinión y anular el registro de Adidas.
Ahora el TGUE acaba de confirmar esa nulidad al considerar que Adidas no ha podido demostrar que el uso de las tres rayas tiene carácter distintivo en toda la Unión Europea para identificar a la marca. El mismo tribunal que ahora le quita la razón se la dio hace poco más de un año cuando dictaminó que la EUIPO hizo bien al denegar el registro como marca comunitaria de las dos bandas de BVBA. En esa sentencia afirmaba que el diseño era tan similar que la marca belga podía beneficiarse de la reputación de Adidas y recalcaba que la alemana había conseguido demostrar la notoriedad de su diseño de las tres rayas.
En un comunicado, la marca alemana ha expresado su decepción por la última decisión del tribunal europeo mientras veía caer sus acciones más de un 1% en la bolsa alemana. Llegados a este punto, Adidas solo puede recurrir ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea y para ello tiene dos meses de plazo.
