Casi el 90% de las pequeñas y medianas empresas consideran que las tecnologías deficientes afectan negativamente a su productividad. Es más, hasta un 34% de los trabajadores en este tipo de compañías aseguran querer dejar su puesto de trabajo por culpa de una herramientas deficientes, mientras que el 92% consideran la tecnología como un factor importante a la hora de aceptar un empleo en una nueva empresa. 

Son algunas de las conclusiones que arroja la investigación “El futuro del trabajo digital”, realizada por Adobe para analizar el impacto de la economía digital e híbrida en la forma de trabajas de las pymes. Para ello, ha encuestado a más de 1.000 empleados en pequeñas y medianas empresas en Estados Unidos, Reino Unido, Australia, India y Japón, con el fin de conocer la influencia de la tecnología en la productividad en un contexto marcado por la recesión, el recorte de plantillas o la inestabilidad socioeconómica. 

La productividad en las pymes

Según los datos compartidos por Adobe, el 45% de los encuestados asocian “ser productivo” con hacer un trabajo que tenga más impacto en comparación con generar ingresos para la empresa, o hacer más trabajo, más rápido y con menos. Tanto es así que el 52% de los empleados señalan responsabilizarse personalmente de su productividad en el trabajo, llegando incluso a esforzarse más por estar en la oficina el 100% de las veces (47%), frente a las grandes empresas (37%). 

Por otro lado, el entorno económico y social influye en la productividad de las pequeñas y medianas compañías. Más del 60% de los empleados de estas empresas sostienen que su productividad se ve afectada por preocupaciones económicas externas, como una recesión o la inflación. No obstante, este dato se eleva hasta el 72% en caso de las grande compañías. Concretamente, el alto coste de la vida, la posibilidad de inflación y la disparidad salarial son las principales preocupaciones de los trabajadores de las pymes. 

El impacto de la tecnología deficiente

La investigación de Adobe indica una evolución positiva de las pequeñas y medianas empresas en términos de digitalización. El 85% de los trabajadores saben que la tecnología ejerce un papel fundamental para ayudarles a trabajar de una manera más rápida e inteligente. Sin embargo, todavía un 55% aseguran que aún realizan en papel al menos la mitad del trabajo de su empresa; y más de 88% afirman que las tecnologías deficientes perjudican su productividad y la de la organización. 

Todo ello puede aumentar la frustración de los empleados, y lleva al 34% de ellos a afirmar que quieren dejar su trabajo por culpa de herramientas deficientes. Además, el 58% de las pymes han señalado que estos ingredientes les hacen perder entre dos y cuatro horas diarias de productividad. 

Cono todo, el coste de una mala o inadecuada tecnología no se percibe solo en tiempo, sino también en el estado emocional y la motivación de los empleados. Y es que el 21% de los trabajadores de pymes señala que se quejará a su jefe de las malas tecnologías de trabajo; y una proporción similar (22%) considerará la posibilidad de renunciar en los próximos seis meses debido a la mala tecnología de trabajo.

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Voluntad de digitalizarse

La encuesta de Adobe señala que en los casos en los que la tecnología está afectando negativamente a la productividad, los empleados están dispuestos a tomar medidas, siendo estas la búsqueda de mejores soluciones y su recomendación a los superiores, animar a la organización a invertir en mejores tecnologías o encontrar soluciones para aplicarlas por su cuenta. 

A este respecto, la automatización y la inteligencia artificial se perfilan como las tecnologías que pueden tener mayor impacto positivo en el trabajo de las pequeñas y medianas empresas. El 85% de este tipo de compañías afirman que la automatización les está ayudando con la productividad, mientras que el 92% de los empleados apuntan que la IA está teniendo impacto positivo. El 22% incluso califican esta solución de “milagro”. 

Por otro lado, los documentos digitales, las herramientas de colaboración y las de videoconferencia figuran entre las más relevantes para el día a día de los empleados de las pymes. No obstante, pese a la evolución del trabajo, este tipo de empresas siguen realizando la mayor parte de su trabajo desde ordenadores portátiles (58%) o de sobremesa (38%). 

Además, la investigación de Adobe indica que más allá de afectar la productividad, la tecnología también contribuye a la captación de talento. El 92% de los trabajadores dicen que la tecnología de trabajo es un factor a la hora de aceptar un puesto en una nueva empresa; mientras que el 24% consideran que es "absolutamente crítico", ya que su éxito depende de una gran tecnología.

“Los directivos de pequeñas empresas desempeñan simultáneamente funciones operativas, financieras, comerciales y de atención al cliente, a la vez que gestionan los factores estresantes ajenos a su trabajo. Y lo hacen sin contar con los recursos necesarios para llevar a cabo su trabajo, entre los que destaca la tecnología”, apuntan desde Adobe. “Las pequeñas empresas tienen una oportunidad clara y real de asegurarse de que la tecnología ayuda a sus empleados y a sus negocios a crecer, no a obstaculizarles el camino”.