Dos grandes patrocinadores de la FIFA han presionado el pasado viernes para que la institución comience las reformas pertinentes a sus actividades delictivas. Coca-Cola y McDonald’s no se han reprimido al pedir transparencia, confianza e imparcialidad en la dirección de la federación, sacudida por los escándalos de corrupción.
Los comentarios llegan sólo días antes de la reunión de comité ejecutivo del 20 de julio, en la que se discutirán posibles reformas de la federación. En la reunión se presentará un cronograma para elegir al nuevo presidente que ha de reemplazar a Joseph “Sepp" Blatter, quien anunció su dimisión tras la publicación de los escándalos.
Y es que en la FIFA ya han sido acusadas 14 personas (nueve funcionarios y cinco ejecutivos) por presunta asociación delictuosa, sobornos, fraude, lavado de dinero y crimen organizado; resultado de una investigación estadounidense. De esas 14 personas, dos son vicepresidentes que ya han sido expulsados y arrestados en Zúrich.
Así, la primera petición fue la de Coca-Cola. Ha sido patrocinador de la FIFA desde 1974 y ahora se pronuncia para solicitar la formación de una comisión independiente que reforme el método de gobierno de la FIFA. “Hemos escrito a la FIFA y le hemos pedido que apoyen una comisión independiente de reformas”, afirmó el viernes una portavoz de Coca-Cola. Además, le ha pedido a la federación “que respalde una comisión independiente y externa supervisada por uno o más líderes ilustres e imparciales para dirigir los esfuerzos necesarios para ayudar a reformar el gobierno de FIFA y sus requisitos de derechos humanos”.
Y después de que se revelara la petición de Coca-Cola, McDonald’s le siguió en su reprimenda pública contra la FIFA. La cadena de restaurantes es patrocinadora desde 1994, y no ha dudado en apoyar a Coca-Cola en la creación de la comisión independiente. “Los recientes alegatos y acusaciones han manchado severamente a la FIFA de una manera que golpea al corazón mismo de nuestro patrocinio", asevera McDonald's. "La FIFA debe ahora implementar cambios significativos para restaurar la confianza y credibilidad tanto de aficionados como de patrocinadores por igual. El mundo espera acciones concretas, al igual que McDonald’s”.
Por su parte, la FIFA respondió que “valora la contribución” de sus patrocinadores corporativos. Pero no respaldó las peticiones de una comisión.