Esta información ha sido incluida en el Informativo de Reason Why.
New Balance se suma a la lista de marcas que se encuentran sumidas en una crisis. Después de dar la bienvenida a Donald Trump tras su elección como Presidente de Estados Unidos y manifestar que prefieren su mandato al de Barack Obama, los consumidores han llegado a hacer hogueras con zapatillas New Balance.
Las reacciones también han llegado en forma de vídeos en los que la gente, simbólicamente, tira sus zapatillas New Balance a la basura.
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El apoyo de New Balance a Donald Trump se hizo viral cuando lo publicó en su cuenta de Twitter Sara Germano, del Wall Street Journal:
Sole Collector, una popular web de noticias sobre zapatillas de deporte, lo retuiteó y ahí empezaron a arder las redes sociales.
La periodista explicaba después que las declaraciones las había hecho el Vicepresidente de Relaciones Públicas de New Balance en relación con el acuerdo de la Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión (TTIP por sus siglas en inglés), propuesto por la Administración Obama y rechazado por Trump y por la marca de zapatillas.
New Balance ha argumentado que el TTIP castigaría a la compañía porque pondría sus zapatos fabricados en Estados Unidos en una desventaja en costes. El TTIP elevaría las tarifas. Y ha pedido tolerancia a toda la comunidad, solicitando que se respeten los motivos por los que apoyan a Donald Trump. “Queremos fabricar más zapatos en EEUU, no menos”.
La marca ha querido zanjar el tema con este mensaje en redes sociales:
Y en España, la agencia de comunicación de la marca ha emitido un comunicado oficial a los medios en el que dicen lo siguiente:
“Como única gran compañía de calzado deportivo que mantiene su fabricación en EEUU, New Balance posee una perspectiva singular sobre el comercio, específicamente en el hecho de que nos gustaría producir más zapatillas y no menos. New Balance ha apoyado públicamente todas las posiciones comerciales previas a las elecciones de Hillary Clinton, Bernie Sanders y Donald Trump que se centraban en la creación de más empleo en América y aún hoy continuamos apoyándolas”.
Y continúa: “Creemos en la comunidad. Creemos en la humanidad. Desde aquellos que fabrican nuestro calzado hasta los que lo visten, creemos en actuar con la mayor integridad, dando la bienvenida a todos los estilos de vida. Desde 1906, hemos labrado nuestro propio camino al ser apasionadamente comprometidos con el hecho de fabricar en nuestras cinco factorías de Nueva Inglaterra, incluso cuando nadie más lo hacía. New Balance y nuestros cientos de empleados alrededor del mundo están continuamente esforzándose para mejorar nuestras comunidades locales. Siempre lo hemos hecho y siempre lo haremos".
