Ikea comienza este lunes 28 de agosto la distribución de 9,9 millones de unidades de su catálogo 2018, la herramienta más potente con la que cuenta la compañía para entrar directamente en los hogares de sus consumidores.
En este contexto, Ikea ha lanzado su nueva campaña “Catálogo”, de la mano de McCann y MRM//McCann, en la que nos hace reflexionar acerca de la importancia que le damos a nuestra casa en nuestro orden de prioridades. Y lo hace en clave de humor a partir de un tercero: nuestro mejor amigo.
Se trata de una actualización de la campaña presentada el pasado mes de abril, ”Díselo cantando”. En esta nueva entrega se concreta cómo puede ayudar el catálogo a tener una casa bien decorada y ordenada.
Una canción pegadiza
La campaña se compone de una pieza audiovisual para televisión y adaptaciones digitales que reflejan diferentes momentos en los que una persona va a casa de un amigo y se queda extrañado por el desorden o elementos decorativos poco apropiados. Así, con una canción pegadiza, esa persona anima a su “colega” a que incorpore pequeños cambios en su hogar con los que podrá mejorar su día a día.
Por otro lado, una de las situaciones habituales que vive la compañía en el mes de septiembre es intentar dar respuesta a la multitud de personas que quieren saber si está previsto que reciban el catálogo en su casa.
Para dar solución a esta demanda, Ikea pondrá en marcha una campaña digital de la mano de Good Rebels. La marca ha creado la Unidad Especial del Catálogo, una pareja de peculiares detectives dedicados en cuerpo y alma a una única misión: supervisar la distribución del nuevo catálogo de Ikea y resolver las dudas que surjan a su alrededor. Montoya y Sánchez prestarán un servicio extra a la Atención al Cliente habitual de IKEA en redes sociales. También se ocuparán de las consultas referidas a la recepción del catálogo a través de una landing, que ofrece diferentes vídeo-respuestas automáticas en función del código postal que el cliente introduzca.
Así, estos detectives se encargarán de que ningún cliente se quede sin su Catálogo Ikea, ya sea en versión impresa o digital.