Desde el pasado viernes, 900 taxis de Madrid lucen publicidad de la campaña electoral del PP; 500 taxis llevan en el exterior del vehículo la imagen de Esperanza Aguirre, mientras que 400 portan la cartelería de la candidata al Gobierno Regional, Cristina Cifuentes.
Pero, a pesar de lo 50 euros más IVA por taxi y día que recibe cada uno, a los taxistas no les compensa hacer publicidad en sus automóviles. Varios ya se han quejado de que están sufriendo actos vandálicos.
El acuerdo alcanzado entre el PP y la cooperativa Radioteléfono Taxi, de la que también forman parte la Asociación Gremial de Autotaxi de Madrid, la Asociación Madrileña del Taxi y la Federación Profesional del Taxi, parece ser que, de momento, sólo será un buen negocio para el Partido Popular. Se estima que el PP alcance con esta acción publicitaria 7,2 millones de impactos, a 9.000 por día y coche, por una inversión total de 45.000 euros.
A los taxistas aún les quedan 11 días portando la publicidad electoral del PP Madrid pero tal y como ha comentado un profesional de este sector “a mí este ingreso extra me viene muy bien, pero estoy deseando que termine la campaña. No puedo dormir por las noches, por si un descerebrado que no pueda ver a Esperanza me destroza el coche”.
El ingreso extra parece que no compensa la ira despertada en las redes sociales y los desperfectos causados por actos vandálicos que están dañando la imagen de los taxistas de la capital. Muchos, como L.C, han comenzado a arrepentirse del acuerdo. ”Lo de menos es la gente que se hace fotos desde fuera riéndose de la cartelería, o algún usuario que rechaza el servicio alegando que prefiere montar en un taxi que no esté patrocinado por el PP. Lo peor es que algunos compañeros han sufrido pintadas y actos vandálicos”.
La mayoría, sobre todo aquellos que viven en barrios más humildes de Madrid, ha admitido que portar publicidad del PP les está obligando a mantenerse alerta las 24 horas del día por miedo a represalias o actos vandálicos contra sus vehículos, por promocionar a las candidatas del partido. “Temo levantarme un día y encontrarme las lunas rotas o las ruedas pinchadas”, ha confesado otro taxista.
La Federación Profesional del Taxi de Madrid ha ratificado la postura de estos taxistas denunciando que la publicidad del Partido Popular ha sido "un gesto desafortunado que nos deja en muy mal lugar y que está muy por encima de los 50 euros que se van a llevarse los compañeros", ha asegurado Julio Sanz, presidente de esta federación.
Y ha añadido que "No estamos de acuerdo en que una concesión administrativa, como es un taxi, sirva para anunciar opciones políticas. Se trata de un servicio que debe mantener el principio de neutralidad ya que nuestra ideología es el cliente y sin embargo, este tipo de publicidad puede dar lugar a asociaciones indebidas”.
Esta es la primera vez que los taxis llevan publicidad electoral en el exterior tras la modificación de la normativa aprobada en 2014. Aunque el taxi como soporte publicitario es legal desde 1998, y de hecho marcas como Motorola, Vodafone y la Cadena Cope han hecho uso de los taxis para sus campañas. Sólo estás tres empresas han apostado por el taxi como soporte publicitario en los 17 años que ha estado permitido su uso a excepción del periodo comprendido entre 2012 al 2014, cuando estuvo prohibido.